Por el Lic. Ramiro
Calle Rivadavia. Siesta de un sábado.
–Ajáp… ¿Y al final a quién votaste?
–A Mercier.
–¡¿Qué?! ¿A quién?
–A Mercier.
–Pero, ¿cómo? ¿Por qué lo votaste a Mercier?
–Porque me parece que acá hizo las cosas bien. Dejó la a provincia con plata.
–¿Cómo que dejó a la provincia con plata, si no fue el ministro de Hacienda de Obeid?
–¿Cómo que no fue el ministro de Hacienda de Obeid? ¡Sííí!
–Nooo. Hace ocho años es senador provincial. Fue ministro de Reutemann las dos gobernaciones.
–Bueno, pero ahí hizo las cosas bien. La provincia en ese entonces estaba bien administrada.
–Pero viejo, fue uno de los inundadores en el 2003.
–Ése fue Reutemann.
–Pero el que está al lado de Reutemann inaugurando las defensas por las que entró el agua es Mercier. Bah, está atrás, por las dudas que en algún momento se den cuenta de que las defensas estaban sin terminar.
–Bueno, eso no lo sabía... ¿qué querés?
–No te puedo creer, te juro… ¿Mercier?
–Y bueno… yo voté por lo que sabía.
–Pero además fue ministro de Hacienda en el final de la dictadura. Quiere decir que es el que tuvo que ordenar y organizar los desastres financieros de los milicos.
–Pero bueno, yo esas cosas no las sé… además, fue ministro de Hacienda, no gobernador.
–¡Pero es uno de los responsables de haber trasladado la deuda privada al sector público! Encima fue vice del Banco de Santa Fe también en la dictadura. O sea que el tipo estaba al tanto de todas las transferencias que se le hacían al Estado… ¡y él era uno de los que las aprobaban!
–Y yo qué sé.
–Y las privatizaciones en los 90… y el boicoteo a la EPE por no poder privatizarla… –suspiro– ¿A vos te parece que la provincia está tan mal?
–Y sí, mirá. Mirá lo que son las calles. Llena de pozos.
–Eso es jurisdicción municipal. Y si vamos al caso, la cadena arranca con la coparticipación federal que el gobierno nacional no le pasa a la provincia y, por lo tanto, menos que menos llega a la ciudad.
–Está bien. Yo voté según lo que creía que sabía.
–Pero Mercier… bueh, en fin. No importa. Cada uno vota al que quiere. –otro suspiro, una mirada al costado y un cambio de tema– ¡Ya estamos listos, eh! ¡Medio ascenso adentro!
–Y si no, lo votaba a Del Sel.
Nota del Lic: originalmente iba a usar esta columna para manifestar mi entusiasmo ante la escasa cantidad de votos obtenida por el senador Juan Carlos Mercier y la poca sorpresa que me causaba que un humorista chabacano alcanzara más del 13% de votos, si tenemos en cuenta que Santa Fe eligió y reeligió a un corredor de Fórmula 1 como gobernador y el país cuenta entre sus vicepresidentes con un campeón de off shore…
Sin embargo, la escena descripta aquí se lleva por delante cualquier tipo de conjeturas que pueda elucubrar y me devuelve al pesimismo de la empiria.
Excelente post, es un personaje que admiro y respeto mucho.