Por Enzo Vicentín
Viajé esta mañana a La Plata, pensando que era un día más. Pero no. Estaba desinformado. No tenía ni idea del desastre. Cuando llegué parecía un día feriado, calles con poca gente, negocios cerrados, el viento se escuchaba en ausencia de los motores y las bocinas. El cielo gris, las calles llenas de hojas, las veredas también. La Facultad, cerrada. Asueto. No entendía, pensé ¿será tan grave? Lo mismo me pasó en abril de 2003. ¿El Parque del Sur hecho un lago? ¿Barrio Roma con tres metros de agua? Hasta que lo ví.
Me encuentro con Andrea, vamos a un bar que tiene luz. Me cuenta que algunos de sus amigos se inundaron. Nos vamos a tomar un colectivo y escucho hablar a dos mujeres de los varios muertos que dejó el agua. ¿Tan grave era? Andrea se salvó; vive en un primer piso. Unos amigos que la visitan no se salvaron. Salieron ayer con el agua hasta la cintura. Viven en Tolosa. Llegan con los pies embarrados, quisieron volver a su casa y no pudieron. Son artistas, perdieron años de trabajo.
La radio, lo único que puede funcionar con pilas, le pone cifras al desastre. En una ciudad sin luz parece que no funciona nada, los celulares fallan, en muchos lugares no hay agua potable, los colectivos andan hasta por ahí nomás. Pero la radio todavía comunica. La radio está. Los que se inundaron están con bronca, piden ayuda, se abren centros de evacuados, hablan los funcionarios, algunos periodistas piden ayudar hoy y criticar mañana, otros no quieren tregua. Después de un rato me vuelvo a la terminal, colectivo hasta Plaza Italia. En esta parte de la ciudad la cosa funciona. Camino cinco cuadras hasta la terminal, veo pasar un camión del ejército, escucho a un helicóptero que viene y va. Todo me hace acordar demasiado a lo que ya ví en Santa Fe. Dos chicas que caminan delante de mío llevan bolsas a un centro de donaciones. Solidaridad espontánea, casi instantánea con los inundados, de eso también me acuerdo. Escucho la radio, no puedo creer la cantidad de muertos que cuentan. Al mediodía eran 35. Me subo al cole, va a Buenos Aires, pasa por 1 y diagonal 74, cerquita de Tolosa, no veo mucho, pero para qué si me lo imagino. Lo ví dos veces en los últimos 10 años. Esta vez la radio me lo contó.
Salgo de La Plata, veo agua a los costados de la autopista. Mucha agua. Bien en la salida de la ciudad veo un barrio de casitas nuevas con calles de agua. Las periferias de las ciudades, los que están en los márgenes, nunca se salvan. Qué tristeza. Ahora que escribo, veo las imágenes y el conteo de víctimas sigue subiendo: 46. ¡46! Cuánta tristeza. La semana pasada me estuve acordando de la inundación del 2007. Ahora esto, y en menos de un mes el 29 de abril. No puedo dejar de comparar. El agua, otra vez. No me acostumbro.
(*) Escrito el 3 de abril. Al cierre de esta edición se contaban 51 muertos en La Plata.
Inundación 2003
Eventos por la memoria
Una serie de actividades, como charlas y exposiciones artísticas, se realizarán en nuestra ciudad con motivo del décimo aniversario de la inundación de 2003. El Museo Histórico y la Estación Belgrano serán sus sedes.
En el Museo Histórico Provincial (San Martín 1490), el 24 y 25 de abril, a partir de las 18.00, se realizarán charlas y una exposición de fotografías sobre el 2003 de Hugo Pascucci, Amancio Alem, José Almeida, Luis Cetraro y Flavio Raina. El 24, el militante de la Marcha de las Antorchas Héctor Sanagustín –quizá quien más conozca en detalle los hechos de 2003– dará una conferencia titulada Crónica de una inundación anunciada. El 25 será el turno de los arquitectos Luciana Barín, Paz Coniglio, Mercedes Doldan y Diego Mandile, cuya exposición se titula Sacando a flote el carácter urbano de la inundación. Memoria, ciudad y política: Relocalizaciones y luchas por el derecho a la ciudad. También estará presente el docente Mariano Medina, con sus Crónicas desde el Centro de Evacuados, historias, recuerdos. Desde la organización de esa doble jornada, afirmaron que la actividad se realiza bajo la consigna de que “conmemorar debería ser siempre no olvidar” por “los nexos profundos entre historia, presente, patrimonio, compromiso y construcción cotidiana”. Además, consideraron que “conmemorar es casi una obligación en un lugar ‘de memorias’.”.
Previamente, este viernes 12 de abril se inauguró la muestra “Marcas en el cuerpo”, con obras de artistas santafesinos damnificados por la inundación de 2003, realizadas a partir de aquella imborrable experiencia. La exposición estará en el Centro Experimental del Color, localizado en la Estación de Trenes Belgrano, y tendrá entrada libre y gratuita.
Por otra parte, en el mismo lugar de barrio Candioti se realizará una muestra de archivos periodísticos sobre la inundación, los días 25 y 26 de abril, también con entrada libre y gratuita.
Publicado en Pausa #111, a la venta en los kioscos de Santa Fe y Santo Tomé.