Las fuerzas políticas apuran las definiciones, a días de presentar los candidatos para las elecciones.
Por Ezequiel Nieva
Tres grandes bloques políticos –el Frente Progresista, el PJ y el PRO– se preparan para las elecciones provinciales y nacionales. Ya delinearon sus estrategias, aunque todavía faltan las definiciones de las candidaturas. Las principales figuras de cada partido –el socialista Hermes Binner, el radical Mario Barletta, el kirchnerista Agustín Rossi y el macrista Miguel Torres del Sel– ya se anotaron en la grilla de partida. Todos ellos buscarán llegar a la Cámara de Diputados de la Nación y traccionar a favor de sus candidatos locales.
El doble turno electoral de 2013 será con fechas unificadas. El 11 de agosto se realizarán las primarias y el 27 de octubre las generales. En la provincia se renovarán la mitad de los concejos municipales, todas las comisiones comunales y además nueve ciudades elegirán intendente: Armstrong, El Trébol, Fray Luis Beltrán, Las Toscas, Puerto General San Martín, Recreo, Roldán, Granadero Baigorria y San José del Rincón. La provincia también renovará nueve de las 19 bancas que posee en Diputados de la Nación Hacia el cierre de listas hay algunas certezas y muchas dudas. El cronograma para las elecciones provinciales va del 2 de junio, cuando vence el plazo para el reconocimiento de alianzas, al 10 de junio, cuando cierra el plazo para presentar listas de precandidatos ante el Tribunal Electoral de la provincia (el 7 de junio es el cierre ante los partidos). Para las nacionales, los plazos van del 12 al 22 de junio.
Disputas en la UCR
El socialismo designó a Binner como cabeza de lista para diputados nacionales. El segundo lugar lo ocupará Barletta y el tercero la actual diputada socialista Alicia Cicilani, quien finaliza su mandato en diciembre. El cuarto lugar de la grilla es para el líder de la Coalición Cívica Pablo Javkin y en el quinto aparecerá algún candidato del PDP (Ana Copes o Pablo Cardinale).
Ese es el esquema que pretende Binner como líder del Frente Amplio Progresista y precandidato presidencial para 2015. No todos sus socios están conformes. Distintos sectores de la UCR –entre ellos Cauce Progresista– entienden que el aporte del radicalismo, por desarrollo territorial y por votos propios, los hace merecedores de ocupar dos de los primeros cinco lugares de la lista.
La UCR santafesina se encuentra dividida entre los sectores que lideran Barletta y el vicegobernador Jorge Henn. El presidente del partido a nivel nacional propicia cerrar la alianza electoral según la definió Binner; el vicegobernador salió a plantear que la de Barletta es una candidatura “autoproclamada” y que el radicalismo debería aspirar mejores lugares en la lista.
Henn sostiene que el acuerdo entre Binner y Barletta no se discutió en el seno del partido. “Dirigentes de un sector han negociado, en función de sus legítimas aspiraciones, sus espacios personales en detrimento del conjunto”, le tiró el vicegobernador al ex intendente, en una nueva versión de un enfrentamiento que comenzó en 2007 cuando Barletta se sumó como candidato en el primer armado exitoso del actual oficialismo, postergando a Henn, quien quería disputar la intendencia y debió bajarse por falta de apoyos.
El vicegobernador criticó los acuerdos realizados por el titular del radicalismo en diferentes distritos: “En las conformaciones de listas la UCR se encuentra por debajo de otras expresiones políticas, que respetamos profundamente, pero que no tienen la representatividad política ni el desarrollo territorial de nuestro partido”. Por ello, Henn reclamó que en Santa Fe “la discusión de la conformación de la lista no se construya en base al toma y daca y que se priorice el colectivo de la UCR”.
“Que Henn se presente a elecciones”, fue la respuesta de Barletta. “Ante las primarias, los partidos políticos no definen candidaturas. Todos están con la legalidad de presentarse a elecciones abiertas, por lo tanto el vicegobernador o quien él piense que puede representar mejor los intereses ante el Congreso de la Nación, lo único que tiene que hacer es presentarse a elecciones”, sostuvo el presidente de la UCR, en referencia a la propuesta de Cauce Progresista de incluir al intendente de Santo Tomé, Fabián Palo Oliver, en la lista de diputados nacionales.
La Convención Provincial de la UCR se reunió el miércoles 22 de mayo para discutir la estrategia electoral. No hubo acuerdo y pasaron a un cuarto intermedio hasta el viernes 31, dos días antes del cierre de la inscripción de alianzas para las elecciones provinciales.
La intención era ratificar la pertenencia del partido al Frente Progresista en lo local y lo nacional. Pero las diferencias internas impidieron el acuerdo y, por mayoría, los convencionales resolvieron aplazar la definición, de modo de darles más tiempo a las autoridades partidarias para avanzar en las negociaciones con el socialismo y el resto de las fuerzas del Frente Progresista.
Además de las divergencias en torno a la lista de diputados nacionales, no está cerrada aún la estrategia para los comicios provinciales. Hay distritos en los cuales la UCR no va a ir en alianza con el socialismo y cuyos dirigentes piden margen para definir sus propios armados: son no más de 15 localidades, donde los radicales irán por fuera del Frente Progresista. En el resto de la provincia hay un principio de acuerdo para que integren listas conjuntas con el resto de las fuerzas del frente.
Unidad con fisuras
El justicialismo acordó un esquema de unidad que, aunque incluye a los sectores mayoritarios del partido, deja afuera a otros espacios, como el Peronismo Federal liderado por Osvaldo Salomón – referenciado con el cordobés José Manuel de la Sota– y 100% Santafesino, la fuerza del diputado nacional Oscar “Cachi” Martínez. Los principales enigmas son cómo se conformará la lista de diputados nacionales y si en esa decisión intervendrá la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El Congreso Provincial del PJ sesionó el 22 de mayo y resolvió constituir alianzas tanto para los comicios locales como nacionales. Ese día se aprobó la conformación de un frente electoral con el Partido Conservador Popular (PCP) que reedita la vieja alianza conocida como Frejuli (Frente Justicialista de Liberación), que en 1973 triunfó en las elecciones nacionales con la fórmula presidencial Cámpora-Solano Lima.
Al PCP se sumarán otros aliados históricos del PJ, como el Partido Progreso Social y el Frente Grande, entre otros. La idea de los kirchneristas santafesinos es ir a los comicios nacionales bajo el nombre Frente para la Victoria-PJ, pero la cuestión se resolverá recién a mediados de junio cuando cierre el plazo la inscripción de las listas de diputados nacionales. Recién entonces se podrá visibilizar el comentado acuerdo entre Agustín Rossi y Jorge Obeid. No es seguro que el ex gobernador sea candidato, aunque su sector irá a una lista de unidad con los sectores del kirchnerismo alineados con Rossi.
En la provincia el plazo para inscribir alianzas vence el 2 de junio; allí se conocerá en detalle el armado para las 362 localidades. En Rosario es seguro que habrá internas para concejales, más allá del pedido de la presidenta –retransmitido por Obeid y Rossi– de confluir en listas únicas. En Santa Fe es diferente: no hay concejales de pura cepa kirchnerista, sino que responden a liderazgos territoriales. Los acuerdos para las nacionales no se reflejarán en la renovación de ediles.
Si bien hay un intento de unidad por parte de las autoridades del partido, las fisuras en el PJ kirchnerista están a la vista. El partido de “Cachi” Martínez ya avisó que presentará listas propias, por fuera del justicialismo, para las elecciones nacionales y provinciales. Lo confirmó la diputada provincial Marcela Aeberhard: “Vamos a trabajar con autonomía y con lealtad a las ideas que tiene 100% Santafesino”.
Descartada la posibilidad de competir con el mismo sistema de neo-lemas que se utilizó en las legislativas nacionales de 2009, desde 100% Santafesino le pasaron factura al obeidismo, al que cusaron de regresar al conglomerado K por meros fines electoralistas. “Pareciera que sobran las voluntades, los votos y las adhesiones como para no plantear algo que sí se hizo en 2009. Para nosotros esto no es una unidad: nos sentimos proscriptos”, sostuvo Aeberhard.
No obstante, el PJ apunta a un acuerdo lo más amplio posible para “aportar desde Santa Fe a la consolidación del modelo nacional”. El objetivo es recuperar el gobierno de la provincia en 2015, para lo cual las elecciones de este año son una instancia clave luego del tercer lugar logrado por Rossi en 2011.
El objetivo es más territorio
El PRO tiene casi cocinada su lista de diputados nacionales. Del Sel será secundado por Gisela Scaglia, militante de la ciudad de Gálvez (segunda en la lista de 2011, detrás del gremialista Vicente Ramón Mastrocola) y el tercer lugar lo ocuparía un histórico del reutemismo que nunca cruzó a las filas K: el ex senador y ex presidente del PJ Ricardo Spinozzi.
Hubo un ensayo por sumar en esa lista a la compañera de fórmula de Rubén Giustiniani en 2011, la demoprogresista Ana Copes. El ofrecimiento lo hizo el dirigente porteño Emilio Monzó. El PDP aprovechó el episodio para negociar en mejores condiciones con el Frente Progresista, donde algunos actores –como los radicales del MAR y de Cauce Progresista– consideran que fuerza fundada por Lisandro de la Torre ya no tiene representación como para aspirar a un lugar expectante en la lista de diputados nacionales.
Con Del Sel, Scaglia y Spinozzi, el PRO buscará repetir la buena elección de 2011, cuando el Midachi quedó a sólo 60 mil votos de la gobernación. En paralelo, el partido liderado por Mauricio Macri arma listas para concejales con el objetivo de cubrir la mayor parte de las localidades y crecer en desarrollo territorial.
Publicado en Pausa #114, a la venta en los kioscos de Santa Fe y Santo Tomé.