La Red
Nueva Vida, vecinos de San Lorenzo y El Arenal junto a
profesionales de la UNL
confeccionaron un diagnóstico que aborda los principales problemas de esos
barrios.
Nueva Vida, vecinos de San Lorenzo y El Arenal junto a
profesionales de la UNL
confeccionaron un diagnóstico que aborda los principales problemas de esos
barrios.
La Red
Nueva Vida junto al equipo del Proyecto Otra mirada de
nuestro barrio, perteneciente a la
Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL, presentaron el Mapa de
vulnerabilidades de barrio San Lorenzo, donde se identificaron las
problemáticas fundamentales que viven los vecinos.
Nueva Vida junto al equipo del Proyecto Otra mirada de
nuestro barrio, perteneciente a la
Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL, presentaron el Mapa de
vulnerabilidades de barrio San Lorenzo, donde se identificaron las
problemáticas fundamentales que viven los vecinos.
El trabajo, que arrancó a mediados de 2012 y estuvo
coordinado por las licenciadas en Trabajo Social Sandra Gallo y Silvia Vega,
busca convertirse en una herramienta de gestión de mejoras para los vecinos y
organizaciones de la zona; además llega para sumarse al mapa de riesgos
hídricos y al plan de evacuación con los que ya contaba el barrio.
coordinado por las licenciadas en Trabajo Social Sandra Gallo y Silvia Vega,
busca convertirse en una herramienta de gestión de mejoras para los vecinos y
organizaciones de la zona; además llega para sumarse al mapa de riesgos
hídricos y al plan de evacuación con los que ya contaba el barrio.
Tres grandes mapas visibilizan los grandes desafíos que el suroeste tiene por delante.
La licenciada Sandra Gallo comentó que “planteamos estudiar
la realidad en su complejidad. La idea es tener una herramienta precisa de
gestión, por eso allí está la voz de los vecinos y de las instituciones,
relevada en ítems muy precisos. Quedaron bosquejados temas como inseguridad,
infraestructura y un montón de cuestiones que nos van a ayudar a gestionar
mejoras. En realidad no encontramos nada que no conociéramos, sólo dimos una
forma distinta a la manera de mirar los problemas a partir de esta categoría de
vulnerabilidad, a la que definimos como aquellas situaciones y aspectos más
frágiles de la realidad. Se ve la situación en términos de cómo estamos, en qué
condiciones simbólicas y materiales está el barrio ante determinadas amenazas
de riesgos”.
la realidad en su complejidad. La idea es tener una herramienta precisa de
gestión, por eso allí está la voz de los vecinos y de las instituciones,
relevada en ítems muy precisos. Quedaron bosquejados temas como inseguridad,
infraestructura y un montón de cuestiones que nos van a ayudar a gestionar
mejoras. En realidad no encontramos nada que no conociéramos, sólo dimos una
forma distinta a la manera de mirar los problemas a partir de esta categoría de
vulnerabilidad, a la que definimos como aquellas situaciones y aspectos más
frágiles de la realidad. Se ve la situación en términos de cómo estamos, en qué
condiciones simbólicas y materiales está el barrio ante determinadas amenazas
de riesgos”.
A lo largo de dos años y medio, se contrastaron datos de la
realidad con la experiencia de talleres en los que se trabajó con la percepción
de las personas, “es decir con lo que la gente siente y piensa sobre los principales
problemas y riesgos con los que viven. En la mayoría de los casos hubo una gran
coincidencia entre lo que percibía la gente y lo que se veía en la realidad”,
determinó Hilda Cardozo, directora de la Escuela Nº 2.028.
realidad con la experiencia de talleres en los que se trabajó con la percepción
de las personas, “es decir con lo que la gente siente y piensa sobre los principales
problemas y riesgos con los que viven. En la mayoría de los casos hubo una gran
coincidencia entre lo que percibía la gente y lo que se veía en la realidad”,
determinó Hilda Cardozo, directora de la Escuela Nº 2.028.
“Agrupamos el trabajo en tres grandes mapas: uno es sobre
vulnerabilidades económicas y habitacionales, otro refiere a cuestiones
territoriales-ambientales, y el último es sobre vulnerabilidades de las
manifestaciones de la seguridad urbana. Trabajamos con este último concepto
porque hay quienes piensan que todas las cuestiones de seguridad e inseguridad
tienen que ver con los contextos socioeconómicos, políticos e históricos en los
que vive la gente. Entonces planteamos que hay manifestaciones indirectas y
directas de esa seguridad, y que hay una relación íntima con las situaciones de
pobreza: todas las manifestaciones de inseguridad tienen que ver con esas
condiciones estructurales, materiales y simbólicas de lo que viven las
personas, donde las manifestaciones directas son los hechos de violencia.
Concretamente, queremos darle una franca batalla a la inseguridad porque esa es
la idea fundamental para la cual se ha creado esta herramienta”, puntualizó
Sandra Gallo.
vulnerabilidades económicas y habitacionales, otro refiere a cuestiones
territoriales-ambientales, y el último es sobre vulnerabilidades de las
manifestaciones de la seguridad urbana. Trabajamos con este último concepto
porque hay quienes piensan que todas las cuestiones de seguridad e inseguridad
tienen que ver con los contextos socioeconómicos, políticos e históricos en los
que vive la gente. Entonces planteamos que hay manifestaciones indirectas y
directas de esa seguridad, y que hay una relación íntima con las situaciones de
pobreza: todas las manifestaciones de inseguridad tienen que ver con esas
condiciones estructurales, materiales y simbólicas de lo que viven las
personas, donde las manifestaciones directas son los hechos de violencia.
Concretamente, queremos darle una franca batalla a la inseguridad porque esa es
la idea fundamental para la cual se ha creado esta herramienta”, puntualizó
Sandra Gallo.
En cuanto al trabajo focalizado con la juventud, Gallo
remarcó que “indicaron los peligros que ellos viven, no estigmatizaron a otros
jóvenes que forman partes de bandas o grupos violentos”. Por su parte, Hilda
Cardozo adelantó: “en los próximos días tendremos un encuentro con el municipio
y, además de mejoras referidas a agua potable, cloacas, gas natural e
iluminación, vamos a solicitar lugares donde ocupar a los jóvenes en épocas de
vacaciones, que es la época donde cuentan con mayor tiempo de ocio”.
remarcó que “indicaron los peligros que ellos viven, no estigmatizaron a otros
jóvenes que forman partes de bandas o grupos violentos”. Por su parte, Hilda
Cardozo adelantó: “en los próximos días tendremos un encuentro con el municipio
y, además de mejoras referidas a agua potable, cloacas, gas natural e
iluminación, vamos a solicitar lugares donde ocupar a los jóvenes en épocas de
vacaciones, que es la época donde cuentan con mayor tiempo de ocio”.
Cabe señalar que la Red Nueva Vida está compuesta por numerosas
instituciones que trabajan en los barrios San Lorenzo y El Arenal, entre las
que se encuentran la
Asociación Amenábar, CAF Nº 23 El Tamborcito, Canoa, Cáritas
San José, Centro de Salud Padre Edelmiro Gasparotto, Centro Cultural Birri, Comedor
Municipal de Ancianos, Centro de Alfabetización Nº 177, Club Comunitario Padre
Gasparotto, Club del Niño, Niña y Adolescente, las escuelas Nº 570 Pascual
Echagüe y Nº 2.028 San Lorenzo, los jardines Nº 272 y Municipal Solidaridad II,
y la Secretaría
de Extensión de la
Universidad Nacional del Litoral.
instituciones que trabajan en los barrios San Lorenzo y El Arenal, entre las
que se encuentran la
Asociación Amenábar, CAF Nº 23 El Tamborcito, Canoa, Cáritas
San José, Centro de Salud Padre Edelmiro Gasparotto, Centro Cultural Birri, Comedor
Municipal de Ancianos, Centro de Alfabetización Nº 177, Club Comunitario Padre
Gasparotto, Club del Niño, Niña y Adolescente, las escuelas Nº 570 Pascual
Echagüe y Nº 2.028 San Lorenzo, los jardines Nº 272 y Municipal Solidaridad II,
y la Secretaría
de Extensión de la
Universidad Nacional del Litoral.