Mamani Mamani: ser andino, muralismo y vivienda social

El 16 de febrero, el artista aymara Roberto Mamani Mamani festejó la culminación de lo que llamó “La obra más importante de mi vida”. Sobre las paredes del complejo de vivienda Whipala, en la ciudad de El Alto, Bolivia, a más de cuatro mil metros sobre el nivel del mar, Mamani Mamani junto a su equipo trabajaron durante cinco meses para pintar 10 mil metros cuadrados de murales sobre las fachadas de 14 edificios de 12 metros de altura, destinados a viviendas sociales destinadas a personas sin hogar.

“Cada edificio tendrá dos murales, en las caras frontal y posterior, mientras que los lados presentarán los colores de la Whipala”, explicaba Mamani Mamani mientras el proyecto estaba en marcha. “Lo que queremos es enfocarnos mucho en la recuperación de nuestras tradiciones y una forma de hacerlo es plasmando nuestros símbolos y conceptos en lugares que forman parte de la vida cotidiana”, agregó el autor.

El deseo de Mamani Mamani es que quienes habiten cada bloque tengan una relación de pertenencia con la infraestructura a través del concepto pintado. Las personas del bloque con la Pachamama tendrán un centro ceremonial para realizar ofrendas; lo mismo sucederá con los que vivan en el bloque con la Cruz Andina, o en el bloque del Ekeko.

La construcción de los edificios fue impulsada por la Agencia Estatal de Vivienda, con una inversión aproximada de nueve millones de dólares, según datos oficiales, con la cual se lograron 336 viviendas. El presidente Evo Morales destacó que los departamentos, de 82 metros cuadrados, cuentan con todos los servicios básicos y que se venderán a un precio de 42 mil dólares, cuando en el mercado inmobiliario el coste de construcciones con estas características puede ser de 80 mil.

Por sus dimensiones, la obra será postulada para el premio de récords Guiness. Como mencionó el vicepresidente Álvaro García Linera durante la entrega de las obras, el lugar se convertirá en un atractivo turístico. Mamani Mamani aseguró que los murales ya pueden verse desde los aviones que llegan al Aeropuerto Internacional de El Alto.

Las fotografías son de la página de Mamani Mamani y fueron tomadas por Iván Orellana Flores.