El Senado de la Nación aprobó por amplia mayoría la designación de Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz como jueces de la Corte Suprema. Así, el máximo tribunal llegó a cinco miembros.
En la votación, el ex intendente de Santa Fe obtuvo 60 votos a favor y 10 en contra. Por su parte, Rosenkrantz fue apoyado por 58 senadores y recibió 12 rechazos. “Este es el resultado de un trabajo muy serio, hablando uno por uno con cada senador”, se congratuló la vicepresidenta Gabriela Michetti.
Con esta decisión, ahora la Corte se completa con variedad ideológica. Rosatti está vinculado al peronismo, fue intendente entre 1995 y 1999. Rosenkrantz es más cercano al radicalismo y fue asesor del ex presidente Raúl Alfonsín.
Rosatti es santafesino y tiene 59 años. Se recibió de abogado y de doctor en Ciencias Jurídicas y Sociales en la Universidad Nacional del Litoral. También fue ministro de Justicia durante el gobierno de Néstor Kirchner.
Rosenkrantz tiene 57 años y se recibió de abogado en la Universidad Nacional de Buenos Aires y es doctor en Derecho por la Escuela de Leyes de Yale. Fue rector de la Universidad de San Andrés. Su estudio de abogados es conocido por defender los intereses de grandes empresas del país, como el Grupo Clarín. Durante la audiencia pública en el senado del 10 de marzo, Rosenkrantz aseguró que se excusará si llega al máximo tribunal un expediente vinculado a esa empresa.
Vale recordar que ambos juristas habían sido nombrados en comisión por el presidente Mauricio Macri mediante un decreto. La decisión generó rechazos y polémicas y por tanto los jueces no asumieron el cargo.
Según trascendió, ahora en el Congreso la oposición y parte del oficialismo buscarán discutir aumentar el número de miembros. El principal argumento que utilizarán los legisladores para forzar el tratamiento del tema es la escasa representación de mujeres en la cúpula del Poder Judicial. Actualmente hay sólo una mujer en el máximo tribunal: Elena Highton de Nolasco.
Sin embargo, la iniciativa parece que no prosperará. Si bien tanto el PJ como la UCR comparten la inquietud, el tema no se encuentra en la agenda del PRO.