La provincia confirmó que se hará cargo, con recursos propios, de la repavimentación de la autopista Santa Fe-Rosario y el tema causó rechazos en la Legislatura. Desde el peronismo y desde el PRO cuestionaron la decisión anunciada por el ministro de Infraestructura y Transporte, José León Garibay, y pidieron informes al Ejecutivo sobre la actuación de la concesionaria Arssa, que debía hacerse cargo de las obras pero apenas completó un tercio de la repavimentación.
La adjudicación fue concretada en 2010 por el ex gobernador Hermes Binner, por un plazo de 10 años. En los primeros cinco Arssa (una UTE conformada por Milicic SA, Laromet SA, Obring SA, Pecam SA, Rovial SA y Vial Agro SA) multiplicó por cuatro el peaje –de 5 a 20 pesos– pero completó apenas un tercio de la repavimentación. El administrador provincial de Vialidad, Pablo Seghezzo, explicó que “el valor del peaje alcanza para tener un buen mantenimiento pero no para hacer los cambios en la estructura del pavimento de una vía como la autopista”.