No hay mucho para escribir sobre una generación de grandes jugadores de fútbol que quedan al borde de un título jugando tres finales consecutivas en tres años, cuando pierden las tres sin recibir un gol en los noventa minutos. Cayeron en el tiempo extra de un Mundial , y las otras finales, por penales.
Las finales están protagonizadas por los mejores y cuando los mejores no se sacan ventaja juegan alargues y hasta llegan a los penales. En esa instancia no hay mejores, porque Messi la puede tirar arriba del travesaño, de la misma manera que alguna vez erró Maradona o Pelé.
Hoy Chile goza de su mejor generación de futbolistas de la historia potenciada por directores técnicos santafesinos (Bielsa, Sampaoli y Pizzi), mientras que nosotros nos quedamos en esa inmensa tristeza del saber que diste e hiciste lo mejor, pero por un penal te hacen creer que la vida, al igual que el fútbol, es para ganarla de punta a punta, de lo contrario sos un fracaso.
Hablen. Escriban. Vomiten su sabiduría para alimentar con esta nueva final perdida (por penales, por penales, por penales una vez más) la cultura del “fracaso”. Y en esa cultura del medio pelo argentino, no se olviden de repetir que Messi lloró y pareció humano. No se olviden de decir pelotudeces, porque los que queremos una vida terrenal estamos tristes, con bronca y con el corazón lleno de injusticia por esta generación fantástica de futbolistas. Por lo tanto a nosotros no nos salen las palabras, queremos putear, hacer profundo silencio o mandarnos al sobre con la angustia de una final perdida. Mientras tanto, los campeones de la vida seguirán hablando desde su pedestal, leyendo Clarín con su título: Argentina volvió a fallar en una final y repitiendo como loros: “que se vayan todos”.
Sólo quisiera recordar algo que alguna vez leí, en esto de jugar finales día a día: "No hay cielos ni hay pozos definitivos. Lo importante, antes, durante y después de las finales, es que las cosas tengan un sentido y no hay mejor sentido que tratar de dejar al fútbol y al mundo mejor de lo que los encontramos".