Pobreza cero: según el Indec, hay al menos 1.440.000 nuevos pobres

“El punto de partida fue mucho peor”, dijo el presidente Mauricio Macri en conferencia de prensa, después de que el Indec vuelva a difundir hoy las cifras de pobreza e indigencia: los pobres son el 25,9% de la población y los indigentes el 6,3%. Los guarismos coinciden con el último relevamiento publicado por la Universidad Católica Argentina –que se habían convertido en una referencia ante la intervención del Indec–, los cuales señalaron que en abril el 32,6% de la población era pobre. Sin embargo, también la UCA había señalado que, al finalizar el mandato de Cristina Fernández de Kirchner, la pobreza estaba en un 29%.

La medición del Indec correspondiente a julio de 2016 arroja como saldo que 32,2% de los argentinos es pobre. El indicador del Observatorio de la Deuda Social de la UCA posee una muestra y una metodología muy diferente, que seguramente generará un guarismo todavía superior cuando sea publicado. Como sea, el presidente Mauricio Macri en su discurso de apertura de las sesiones ordinarias de marzo de este año utilizó los guarismos de esta institución para señalar que la pobreza estaba en un 29%.

"El 29% de la población vive en situación de pobreza y el 6% en indigencia"

— Mauricio Macri (@mauriciomacri) 1 de marzo de 2016

En consecuencia, el resultado de la gestión de Cambiemos en estos 10 meses fue la generación de (al menos) 1.440.000 nuevos pobres, considerando la diferencia entre el 29% que señaló la UCA para diciembre de 2015, el 32,2% que estimó el Indec para julio y una población total estimada de 45 millones de argentinos.

Cifras en detalle

La medición del Indec sólo se realiza en 31 aglomerados urbanos, en los que viven 27.201.000 de personas. Sobre esta base, el Indec señala que hay 8.772.000 pobres, de los cuales 1.705.000 son indigentes. Los porcentajes son los ya expresados: el 25,9% son pobres, indigentes el 6,3%. En una proyección a un estimado de 45 millones de habitantes, la cantidad de pobres asciende a 11.655.000 y la de indigentes a 2.835.000. Estos últimos son los que no tienen ni para comer. En conjunto, este 32,2% de argentinos pobres significan 14.490.000 de personas.

Las zonas más críticas son las norteñas: en el noreste, la pobreza asciende al 40,1% de los habitantes y en el noroeste llega al 35,8%. Luego en Cuyo se estima un 35,6% de pobreza.

Más allá de las variaciones regionales y en la composición de los hogares, que el Indec estima para elaborar estos datos, hay que considerar que la línea de pobreza se establece sobre una línea de ingresos que ronda como máximo los $12.800 pesos por hogar (no por persona). En el caso de la indigencia –cuando ya ni te alcanza para comer– estos ingresos se estiman en una franja a los $4.400 por hogar. Es decir: ingresos ruinosos, en ambos casos.

¿Quién señor? ¿Yo señor? No, señor

En la conferencia de prensa brindada por el presidente, junto a la ministra de Desarrollo Social Carolina Stanley, se puso el acento sobre la normalización del Indec, el camino del sinceramiento y la transparencia y los males de la corrupción.

Este punto de partida es sobre el cual acepto ser evaluado como presidente: por si pudimos reducir la pobreza en este gobierno pic.twitter.com/518kWpf596

— Mauricio Macri (@mauriciomacri) 28 de septiembre de 2016

Como si no hubiera asumido en diciembre, Macri establece que sólo aceptará que se evalúen sus políticas de acuerdo a estos datos difundidos por el Indec. La inverosimilitud obliga a repetir lo que el presidente mismo dice. Aparentemente, su gobierno no comenzó el 10 de diciembre de 2015.

Respecto de las medidas para afrontar la situación, Macri puntualizó en proyectos de urbanización integral “En las 100 poblaciones más vulnerables en la Argentina”. También señaló que aumentaron “la cantidad de programas sociales, la tarifa social, la asignación universal”. Sobre todo, enfatizó sobre la inflación: “El haber bajado la inflación drásticamente está logrando la mejora del poder adquisitivo del salario. La peor estafa es el impuesto de la inflación”, indicó, pese a que la pérdida del salario real –la diferencia entre la inflación y el aumento salarial– es inédita en la historia reciente, al punto que los periodistas reiteraron tres veces sus preguntas respecto de la reapertura de paritarias, el reclamo de las fuerzas sindicales.

“Pobreza cero en cuatro años es obvio que no se alcanza. Nosotros fijamos pobreza cero como un camino”, reconoció el presidente. Y celebró que “El Indec puso la verdad sobre la mesa”, ya que ahora tenemos “información estadística real” y no “una ficción de cifras” producto de un pasado donde el “nivel de engaño y de corrupción fue sorprendente”.

“Este es el verdadero punto de partida, el verdadero equilibrio económico. Sin cepos, sin conflictos financieros con el mundo, sin distorsiones. Esta es la realidad”, explicó Macri, naturalizando los resultados de sus políticas económicas. “La credibilidad va a traer más inversión y más empleo”, expresó. Y dejó un desafío: “Vayamos evaluando cada seis meses”.