La crisis en las ventas de vino para mercado interno se profundiza. Desde octubre de 2016, todos los meses, menos marzo pasado, fueron los peores desde que hay registro (2009). En abril, la caída fue de 16,6% en comparación con 2016.
El Instituto Nacional del Vino dio a conocer sus últimos datos sobre comercialización de vinos, correspondientes a abril de 2017. Fue el peor abril desde que hay registro, un récord negativo que se mantiene casi constante desde octubre del año pasado. Corresponde que las ventas suban, conforme el frío aumente. Sin embargo, al cierre del primer tercio del año está claro que este será un nuevo año perdido para vinerías y afines.
En el acumulado de los últimos 12 meses –de mayo de 2016 a abril de 2017– la caída ya es de 10,53%. Se trata, lógicamente, de los peores 12 meses desde que hay registro. La venta de abril, además, cayó en relación con marzo de 2017, cuando usualmente sucede al revés: abril es mejor mes que marzo.
La merma de 16,6% de abril de 2017 en comparación con 2016 se suma, además, a la caída de 4,63% que ya hubo en abril de 2016 respecto de abril de 2015. De forma acumulada, en los dos años de Cambiemos las ventas de vino para consumo interno cayeron un 20,2%.