Si bien la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (la NOAA) todos los meses da cuenta de cómo se agrava el calentamiento global, Donald Trump retiró a Estados Unidos de los acuerdos por el cambio climático.
Es un cuento chino. Con ese argumento el presidente de la mayor potencia mundial retiró el apoyo al Acuerdo de París, una medida que ya desató el rechazo de sus pares de Alemania y Francia. “He cumplido una tras otra mis promesas. La economía ha crecido y esto solo ha empezado. No vamos a perder empleos. Por la gente de este país salimos del acuerdo. Estoy dispuesto a renegociar otro favorable para Estados Unidos, pero que sea justo para sus trabajadores, contribuyentes y empresas. Es hora de poner a Youngstown, Detroit y Pittsburgh por delante de París”, dijo Trump el jueves 1° de junio por la mañana.
Ciencia ficción, psicodelia y terror político: estamos experimentado en tiempo real una novela de Kurt Vonnegut (Payasadas, no sólo por su título, quizá sería la más ajustada como metáfora). Estados Unidos es el segundo emisor de gases con efecto invernadero, detrás de China. Sin embargo, eligió retirarse de un acuerdo que incluía a todos los países del mundo, excepto Siria y Nicaragua. No es la primera vez que sucede: en 2001 George Bush había retirado al país del Protocolo de Kioto, el fundacional antecedente internacional respecto del principal problema planetario. Estamos marchando con euforia –y parece, sin vuelta atrás– a un horno mundial de eventos climáticos extraordinarios y crecimiento de la altura de los mares.
Qué dice la ciencia
La propia NOAA expone las subas extraordinarias en la temperatura global.
Mayo de 2015 fue el mes más caluroso en todo el mundo, de los últimos 137 años (es decir: desde que hay registro). Luego, junio de 2015 fue el más caluroso. Los récords se rompieron 16 meses consecutivos hasta que septiembre de 2016 fue el segundo mes más caluroso de la historia… detrás de septiembre de 2015.
Che, mientras tanto, 2016 es el año más caliente de la historia
El último dato de NOAA corresponde al mes de abril de 2017. La temperatura terreste y océanica estuvo 0.90°C por encima del promedio del siglo XX (se estima que cuando esté 2°C arriba se terminó lo que se daba). Abril fue el segundo mes más caluroso desde 1880, detrás de abril de 2016 (1.07°C por arriba del promedio) y arriba de abril de 2010. Las temperaturas más cálidas se registraron en la zona del círculo polar ártico.
En promedio, desde enero hasta abril estamos en el segundo año más caluroso desde 1980, por debajo de 2016 y por arriba de 2015. Así de grave es la situación.
La dimensión del asunto para las fuerzas globales
A las inmediatas reacciones de Ángela Merkel y Emmanuel Macron, se sucedieron los rechazos anticipados de gigantescas corporaciones económicas que, por sí solas, representan mucho más que la mitad del PBI mundial.
Dear President Trump, as some of the largest companies in the US, we strongly urge you to keep the US in the Paris Agreement. pic.twitter.com/ztSXyYtRrm
— Marc Benioff (@Benioff) 1 de junio de 2017
Estados Unidos es el segundo emisor de gases de carbono. China clava el 20% de las emisiones, el imperio comandado por la estrella de reality shows el 18%.