La provincia renueva nueve bancas en el Congreso pero los espacios políticos más importantes, aún con internas, ya comenzaron a discutir el modelo de provincia para 2019.
Como ocurrió en 2013, este año se unificaron las elecciones de diputados nacionales con las de concejales. Se realizarán en las mismas fechas –las primarias el 13 de agosto y las generales el 22 de octubre– pero con dos sistemas diferentes: las de diputados con boleta sábana de un solo cuerpo y las de concejales con la boleta única, por lo cual el “efecto empuje” será muy limitado. Tampoco habrá tracción de arriba hacia abajo y toda la “nacionalización” de la elección pasará por la participación de Mauricio Macri en apoyo a los candidatos de Cambiemos y, como contracara, el posicionamiento de las fuerzas opositoras –tanto el PJ como el Frente Progresista– respecto del gobierno nacional.
La Secretaría Electoral autorizó ocho alianzas transitorias y 12 partidos políticos para las primarias. En esa instancia quedarán definidas las listas que competirán en octubre por las nueve bancas de diputados nacionales que renovará la provincia. El Frente Progresista y el PJ llegaron divididos al cierre de listas y tendrán internas en agosto. En Cambiemos iban a ser dos listas, pero la Junta Electoral partidaria solo avaló una.
Picante con el macrismo
Para el gobierno de Miguel Lifschitz, la elección intermedia es importante en dos aspectos. Por un lado, el Frente Progresista dirimirá con sus rivales locales no solo los cargos de concejales sino también la grilla de partida para 2019. El oficialismo colocó dos candidatos fuertes a la cabeza de sus listas en Santa Fe y Rosario: Emilio Jatón y Pablo Javkin. Por otro lado, el gobierno disputará con sus rivales provinciales algo más que un puñado de bancas en el Congreso: se juega allí el aval o el rechazo del electorado santafesino a la gestión de Macri.
La lista “oficial” del gobierno está integrada por socialistas, radicales frentistas (de los grupos NEO y MAR) y otros aliados como el el PDP, el partido Pares y Libres del Sur. La encabeza el ministro de la Producción Luis Contigiani, seguido por Fabián Bastía (del sector NEO de la UCR), la diputada socialista Alicia Ciciliani y Juan Cruz Cándido, de la Juventud Radical. La designación de Contigiani por parte de Lifschitz tuvo el aval del titular del PS, Antonio Bonfatti, y es un claro posicionamiento político de la provincia respecto de la Nación: Contigiani fue el ministro que encabezó las demandas de los sectores productivos ante los tarifazos y además es el principal crítico de las políticas económicas de Macri.
El ministro de la Producción empezó su campaña con frases fuertes:
- Voy a defender a los santafesinos del centralismo porteño.
- Los créditos que toma Santa Fe son para invertir en obra pública para la gente, no para engordar el circuito financiero.
- Los candidatos de Cambiemos son voceros de lo que decida Buenos Aires para la provincia.
- Promovemos los valores del federalismo y un modelo de producción y desarrollo, ante un modelo de un país para pocos, de un gobierno para ricos.
- Acá están la mayoría de los radicales, que son los que defienden la causa de los desposeídos de Alem, no como aquellos dirigentes que a partir de su alineamiento con el gobierno nacional claudicaron las banderas históricas de la UCR.
Interna pacífica
El Frente Progresista tendrá internas en la categoría de diputados nacionales. La concejala rosarina María Eugenia Schmuck y el diputado provincial Fabián Palo Oliver, ambos de la UCR, presentaron su propia propuesta. Sin sacar los pies del plato, Schmuck busca posicionarse como una alternativa no socialista en su ciudad y también en el plano provincial: “Queremos que sea la gente la que defina las listas y no el socialismo”.
La decisión de Schmuck y Palo Oliver se debe al malestar que causaron las definiciones del socialismo en sus ciudades: en Rosario, desplazaron al candidato de Schmuck –Sebastián Chale– para darle ese lugar a un extrapartidario –el deportista transplantado “Lichu” Zeno–; en Santo Tomé, el socialismo presentó su propia lista de concejales, encabezada por la periodista Gabriela Solano, y así rompió un histórico acuerdo tácito con el ex intendente y actual diputado. Por ese motivo, tanto Schmuck como Palo Oliver inscribieron sus propias listas de concejales y, luego, se lanzaron a la carrera interna también en la categoría de diputados nacionales.
En el inicio de la campaña, a diferencia de lo que pasa en Cambiemos y en el PJ, los dos precandidatos cruzaron elogios y prometieron dar una batalla limpia. “Será un placer Luis Contigiani poder debatir ideas en las primarias y trabajar juntos para fortalecer el Frente Progresista. Mis respetos hacia vos”, twitteó la concejala rosarina. “Será un honor compartir la pasión de representar a los santafesinos, honrar la política y al Frente Progresista”, devolvió Contigiani.
En el Frente, se advierte el intento de dejar de lado diferencias internas y mostrar cohesión no solo para la campaña sino, además, para el decisivo tramo previo a la renovación de cargos en 2019.
Anti K y K
En el PJ hay tres listas de diputados nacionales. El primero en lanzarse al ruedo fue el kirchnerista Agustín Rossi, que se inscribe en el espacio Unidad Ciudadana lanzado por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner aunque, a diferencia de ella, competirá por adentro del partido. Los senadores provinciales junto a intendentes y presidentes comunales del PJ armaron una lista para enfrentar a Rossi con la ex jueza rosarina Alejandra Rodenas a la cabeza. A Rodenas la apoya además un amplio abanico de gremios no kirchneristas: el concejal Juan José Saleme, de UPCN Santa Fe, y el dirigente Antonio Donello, de la UOM Rosario, ocupan el segundo y tercer lugar. La tercera lista la encabeza el ex diputado Pablo Dibert.
Por primera vez, el PJ santafesino irá a internas sin contar ni con el gobierno nacional ni con el provincial. Rossi y Rodenas se definen opositores al gobierno de Macri, pero tienen distintas miradas de la gestión de Cristina y de la estrategia de cara a 2019. Para la ex jueza penal es necesario “reconstruir” el peronismo para que sea una opción de poder en la provincia. Desde su comando de campaña, no anduvieron con medias tintas: “Rodenas reunió a todo el peronismo para ganarle a Rossi”.
Rodenas se desempeñó por casi tres décadas en la Justicia y tuvo a su cargo la emblemática causa Los Monos. Renunció como jueza para competir por primera vez en elecciones, a pedido de los senadores. En su primer acto público como precandidata, Rodenas trazó la raya: “Cada elección es una oportunidad para acercarnos o alejarnos de lo que deseamos. Algunos quieren un peronismo K, pero acá tenemos un peronismo con todas las letras”.
Rossi, por su parte, apoyará su campaña en la de Cristina y buscará posicionarse como el principal referente anti-Macri en Santa Fe. Es el mismo objetivo que persiguen Contigiani y Rodenas. De entrada, el Chivo definió que se identificará con la ex presidenta: “Es el mejor camino para volver a tener futuro”.
El ex ministro de Defensa de la Nación plantea como principal objetivo “ponerle un freno al ajuste macrista” y “reivindicar el liderazgo de Cristina Fernández de Kirchner”. En el lanzamiento de Unidad Ciudadana, el Chivo resaltó que su propuesta “representará a todos los santafesinos afectados por la política neoliberal de Macri”
En su última visita a Santa Fe, el 3 de mayo, Macri había dicho que Santa Fe es “la provincia que más se benefició con los cambios” implementados desde 2015. Para Rossi, el pronóstico va para el otro lado: “La provincia de Santa Fe va a ser una de las más afectadas por este modelo económico”. Por eso definió que su propuesta electoral “es antimacrista” y hará campaña en defensa de “los 12 años de transformaciones a favor del pueblo trabajador que ha llevado a cabo el kirchnerismo”.
Desde lejos no se ve
Sergio Massa no logró unificar una propuesta articulada en Santa Fe y se mantendrá lejos de la provincia, involucrado en la pelea de Buenos Aires (allí enfrentará a Cristina, al candidato de Cambiemos Esteban Bullrich y al ex ministro Florencio Randazzo). En Santa Fe, el massismo va en dos espacios: “Proyecto Santafesino”, liderado por los ex reutemistas Diego Giuliano y Laura Venesia, y la lista “Una Santa Fe Renovada” del Partido Popular encabezada por la mediática Amalia Granata. Las primeras declaraciones de Granata remiten de inmediato a Del Sel: “Los pobres que cobran planes no saben hacer otra cosa que cobrar planes. Nadie les enseñó a hacer otra cosa”. ¿Le alcanzará el alto grado de conocimiento para meterle ruido a los principales frentes políticos? Es una de las incógnitas de estas elecciones.