En La Casa del Nogal, los vecinos de Colastiné Norte comparten sus inquietudes sobre el barrio y participan de actividades sociales como la Feria de Artesanos de la Costa.
“El hecho de reunirse es conocer la necesidad de otro”. La definición representa a todas luces el espíritu de quienes abrazan La Casa del Nogal, un ámbito que en marzo de este año abrió sus puertas a los vecinos de Colastiné Norte. Según Mercedes Bisordi, una de las participantes, “es un espacio de reunión y de construcción colectiva. Surgió a partir de la voluntad de los vecinos y funciona en la casa de Gabriela y Araceli Bruno”, en el kilómetro 2,2 de la Ruta 1.
Teniendo en cuenta la idiosincrasia de la zona, la idea fue gestar “un centro cultural y social que trabaje fundamentalmente el tema de la pertenencia, ante la falta de un tejido social”, sostuvo por su parte Gabriela Bruno. “La ciudad se expandió azarosamente, sin planificación urbana, hacia Colastiné y el cordón de la Ruta 1 de manera anárquica. Se convirtió en una opción para ir a vivir, aunque la mayoría trabaja en el centro de Santa Fe y envía sus chicos a escuelas de la ciudad”, agregó.
De esa forma, La Casa del Nogal –cuya constitución como asociación civil se encuentra en proceso– comenzó a propiciar diferentes propuestas sociales, culturales y artísticas. Y una de ellas fue darle lugar a la realización de la Feria de los Artesanos de la Costa que, con regularidad, posibilita que productores y creadores del barrio pongan a la venta sus productos.
[quote_box_right]“La premisa es que el que hace las cosas sea el que esté vendiendo. La mayoría son mujeres, jefas de hogar. Para algunas es su única salida laboral". [/quote_box_right]
“Se necesitaba un lugar donde los vecinos nos juntemos sin ninguna dirección política, bien horizontal, a participar y a hacer cosas. El que quiere dar un curso o una charla lo puede hacer, y también es un espacio de discusión sobre las cosas del barrio”, precisó Bisordi en referencia a temas como el transporte, la recolección de residuos, el mentado gasoducto y los servicios en general. En esa confluencia de inquietudes, también se posibilita que los pobladores de la zona puedan realizar actividades como talleres y cursos de zumba, freestyle, porcelana fría, fotografía o crochet. Así, “todos los que quieren hacer una actividad lo pueden hacer en el barrio, caminando, en mi caso dos cuadras. Estoy fascinada con la cercanía, que algo quede cerca en Colastiné, que no tenga que venir a Santa Fe, es ideal”, enfatizó Bisordi.
El único requisito para la participación es asociarse a La Casa del Nogal y contribuir con 50 pesos por mes, y en el caso de las actividades vinculadas a las artesanías se suma un costo por los materiales, “aunque todo es accesible”.
En el lapso de estos pocos meses prosperó –como se mencionó– la Feria de Artesanos que transcurre entre música y la convivencia con artistas del lugar. “Los Artesanos de la Costa encontramos un lugar. Tenemos una parte techada y está el parque donde están los nogales, encontramos un lugar, en el centro de Colastiné Norte. Encontramos el lugar y después nos enganchamos con las actividades en sí y también nos apropiamos de la casa y del barrio”, remarcó Bisordi, quien además es productora de cervezas artesanales.
Como suele ocurrir con los emprendimientos asociados a la economía social, “la premisa es que el que hace las cosas sea el que esté vendiendo. La mayoría son mujeres, jefas de hogar. Para algunas es su única salida laboral –destacó–. Por eso le damos una continuidad a la feria y tiene una periodicidad. En la feria se encuentran carteras, platería, cosmética natural, mantelería, muñecos, todo de muy buena calidad. También hay pan casero, comida vegetariana que se puede llevar, no sólo para comer ahí, también hay tortas, repostería y la cerveza artesanal que se puede tomar ahí, tirada de barril o comprar botellas. Además, hay ropa”, describió, en tanto señaló que se mantiene una constante capacitación sobre la formalización de emprendimientos, así como sobre la correcta manipulación de los emprendimientos.
Al hecho de conformar un espacio común, que promueve la sociabilidad, el intercambio y la participación, se suma la ventaja del ahorro. “El hecho de tener como lugar el mismo barrio donde producir y ahí mismo vender genera un ahorro gigantesco de energía y de dinero porque no hay que movilizarse hasta el centro. El barrio ha crecido mucho y así como la gente produce, también consume. Creemos que, a medida que se haga más conocida la feria, esto va a crecer y que no sólo con el formato de la feria, sino también con los cursos. La proyección es toda porque no hay nada. La Casa del Nogal es un espacio de construcción colectiva”, planteó Bisordi.
Para agendar
- Feria de Artesanos: sábados de 11 a 17, cada 15 días.
- Zumba: lunes y jueves de 11.30 a 12.30.
- Taller de Freestyle y Beatbox “Nogal Free”: lunes de 15 a 17.30.
- Porcelana fría, bordado mejicano y arte decorativo: martes y jueves de 15.30 a 17.30.
- Conversatorio de Mujeres: miércoles de 16 a 17.30.
- Taller “Fotografía para jugar” (para adolescentes y adultos): viernes a las 14.
- Taller “Crochet desde Cero” y “Deco Crochet”: viernes de 15a 18.
Facebook: lacasadelnogal