A los 20 meses continuos de retroceso en las ventas de los negocios minoristas se suma ahora la caída de las ventas en supermercados y shoppings (2,1% para atrás en los dos casos), según el último dato de Indec, correspondiente a julio.
Que algunos sectores repuntan, es cierto. Que ese repunte no llega siquiera a recuperar lo perdido en 2016, también. Y que menos todavía se percibe en el bolsillo del consumidor, más todavía. El Indec informó hoy que las ventas de los supermercados y shoppings volvieron caer. Como recién volvieron a hacer comparaciones interanuales a partir de abril de este año, puede decirse que es por cuarto mes consecutivo. Es claro que la malaria es mucho muy anterior, como lo muestra la Confederación Argentina de la Mediana Empresa.
Récord: 20 meses seguidos de caída de ventas en el comercio minorista
Tanto los supermercados como los shoppings tuvieron una caída de ventas del 2,1% en julio pasado, en la comparación con julio de 2016. Estos datos no son sólo un indicador de la situación del consumo popular –la provista fuerte de alimentos se hace en el super–, sino que también se traducen en el empleo.
En los supermercados, se registró en julio una caída del 1,2% en la cantidad de personal ocupado respecto de igual mes de 2016, que se convierte en una merma del 0,2% respecto de junio de 2017. El impacto laboral es, no obstante, diferenciado: entre los gerentes, supervisores y otro personal jerárquico hubo una suba de personal del 1,3% (en junio la caída llegó al 8%), pero entre los cajeros la pérdida fue de 1,6%
En los shoppings, la cantidad de locales sigue mermando. En julio de 2016 había 3.037, en julio de 2017 unos 3.006. De esos locales, en 2016 estaban activos unos 2.886, pero en julio de 2017 esa cifra bajó a 2.825.
Otro indicador respecto del empleo es el de las salas cinematográficas de los shoppings. La cantidad de salas en actividad en Capital Federal y Gran Buenos Aires –allí realiza es estudio el Indec– se mantuvo en 191 de un año al otro. Julio, ha de tenerse en cuenta, es mes de vacaciones, una de las temporadas más altas en el cine. Pues bien, en promedio asistieron a cada una de esas salas unas 14.459 personas en el mes, durante 2016. Esa cifra bajó a 13.682 en julio de este año. Tristeza de los pochocleros, tanto de quienes lo comen como de los que lo sirven.