La siderurgia repunta, pero todavía está un 8% abajo de 2015

Va pasando lo mejor del año electoral y todavía la producción siderúrgica no se recupera, pese a que está mucho mejor que en 2016. En verdad, es el segundo peor año desde 2009. Con el nuevo enfriamiento previsto después de octubre, ¿qué sucederá?

La Cámara Argentina del Acero (CAA) difundió sus datos sobre producción siderúrgica de septiembre, que se encuentra un 31,43% por encima de la septiembre de 2016. Así, en el acumulado de enero a septiembre, 2017 ya está un 12,82% por encima de 2016. La cuestión es que la misma comparación respecto del 2015 pone al año en curso un 7,99% abajo. Y, para el caso, 2017 viene siendo el segundo peor año desde que la crisis internacional impactó en 2009.

¿Qué sucederá con la producción siderúrgica cuando el ajuste vuelva a apretar vía tarifazos, aumentos del combustible y del transporte? Acaso en el sector no impacte demasiado, pues está claro que no son proveedores hacia la industria o que, al menos, no consideran esa integración como estratégica en el actual panorama.

La propia CAA es la que pinta de cuerpo entero> el nuevo modelo económico: profundización del extractivismo, desindustrialización y patria contratista en los años electorales: "Aumentaron los despachos destinados al sector de la construcción, que se consolidó como el segmento con mayor signo de robustez, principalmente en el sector de la obra pública. Se espera que el incremento de créditos hipotecarios impulse la obra privada el año entrante. Por su parte, los despachos dirigidos a productores de maquinaria agrícola mantienen un sostenido crecimiento, mostrando un buen nivel de actividad en la producción y ventas de cosechadoras, tractores, sembradoras e implementos agrícolas. Además, se mantiene sostenida la actividad vinculada a los desarrollos en las áreas energéticas como Vaca Muerta y los gasoductos troncales en Córdoba, traccionando el crecimiento de la demanda de tubos de acero".

El panorama de reactivación apenas logra la victoria de superar el año pasado y el de la peor crisis mundial desde la década del 30 del siglo XX.