Homicidio calificado con alevosía y ensañamiento en contexto de violencia de género (femicidio), fueron los delitos que se le imputaron a Juan Ramón Cano por el crimen de la maestra Vanesa Castillo. Los fiscales Andrés Marchi, Mariela Jiménez y Alejandra del Río Ayala aseguraron que Cano podría ser condenado a prisión perpetua.
Al acusado, además, se la atribuyeron los cargos de amenazas a un fiscal y atentado a la autoridad porque hirió a un policía en el momento en que se produjo la detención.
Durante la audiencia imputativa, que tuvo lugar en la mañana del sábado 17 en los tribunales santafesinos, Cano pidió disculpas por la agresión al policía pero no mostró arrepentimiento sobre las 13 puñaladas que le propinó a Vanesa Castillo y que terminaron con su vida.
Femicidio no íntimo
La fiscal Mariela Jiménez aseguró que se trata de un femicidio no íntimo, ya que no existía una relación previa de pareja o expareja entre Cano y Castillo, pero es una muerte que se da en contexto de violencia de género, ya que el acusado quiso imponer sus requerimientos por la fuerza y esto se produjo en un contexto de relación desigual de poder.
Por su parte, las abogadas de la familia Castillo, Carolina Walker y Erica Stalker solicitaron continuar con la investigación ya que consideran que "puedo haber otros motivos para atacarla, que no haya sido solo la bronca por no haberle comprado unas ojotas o haberse negado a llevarlo a una plaza" y agregaron que "es claro que esto no hubiera ocurrido si Vanesa en vez de ser mujer hubiese sido hombre".
Las abogadas también comentaron que Castillo había iniciado un protocolo de actuación, aunque aún se desconoce si fueron hacia Cano, por lo cual esperan que el Ministerio de Educación aporte información al respecto.