En sus murales plasma los detalles más chiquitos de los paisajes urbanos después de haberlos visto en un breve recorrido en helicóptero.
Stephen Wiltshire nació el 24 de abril de 1974 en el Gran Londres, que es lo mismo que decir las afueras de la ciudad capital. A los tres años le diagnosticaron autismo y, dos años después, dice su primera palabra: "Papel", lo que significó su primera manifestación a favor del arte del dibujo, primeramente inspirado en la vida silvestre y en las personas que lo rodeaban.
Cuando empezó a dibujar paisajes urbanos la cosa ya se volvió más seria, ya que le alcanzaba con pasar una vez para replicarlos idénticamente. Tal fue así que cuando tenía ocho años el ex primer ministro Edward Heath le encargó que le dibujara la Catedral de Salisbury. A los nueve empezó a hablar con mayor facilidad, aunque su manera de expresarse ya estaba clara hacía rato.
Para esta altura ya estaba diagnosticado con el extraño síndrome del sabio, especialmente después de haber visitado al famoso neurólogo neoyorkino Oliver Sacks - gancho, este médico fue nominado a los Óscar por Awakenings, basada en su libro homónimo y protagonizada por Robin Williams y Robert De Niro. Ahí tenes. Bueno, el doctor/escritor se había entrevistado con Stephen, que después dela charla le hizo un retrato bien lindo de la casa (que acababa de conocer, claro). Para el prólogo del segundo libro del dibujante, Ciudades (1989), el neurólogo escribió: “La combinación de las grandes capacidades con las grandes discapacidades presenta una paradoja extraordinaria: ¿cómo es posible que dos opuestos vivan juntos?”.
En 2006 el, por entonces, príncipe Carlos le entregó la condecoración como Miembro de la Orden del Imperio Británico como reconocimiento a sus contribuciones al mundo del arte.
Londres, Manhattan, Madrid, París y hasta Río de Janeiro fueron dibujadas por su rotulador Staedtler después de memorizarlas durante paseos algunos minutos en helicóptero.