Fútbol en escena: se estrenó en la Sala Marechal la obra El Trinche: el mejor futbolista del mundo, de Jorge Eines.
Una pelota iluminada en medio de la escena, un espacio sin tiempo con diarios viejos, algunos cajones que pueden remitirnos a bancos de un vestuario de un club de barrio y libros suspendidos en el aire. De pronto aparece el Trinche, jugador rosarino que no trascendió mas allá de Primera B en el Club Atlético Central Córdoba, quizás no tan recordado por la mayoría pero inolvidable para quienes lo vieron jugar.
El Trinche (Claudio Garófalo) se sienta y se pone a pescar... ¡un libro! El telón se levanta en ese instante dando paso al juego y a la primera metáfora. “Cuando lo llama Menotti para el mundial usted no va porque estaba pescando. ¿Es cierto eso?”, irrumpe en la escena un joven periodista. “Soy un pescador de libros” es la respuesta del deportista que Diego Maradona, José Pekerman y Cesar Luis Menotti nombran como uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol argentino.
El joven periodista (Lucas Ranzani) lo llenará de vida y preguntas, mutando por varios personajes que permitirán recorrer la trayectoria del Trinche. Si bien el director Jorge Eines y su coautor español José Ramón Fernandez, buscan resaltar aquel lado idealista del fútbol que se asienta en los valores que se contraponen al deporte actual donde prima la fama y el dinero, tampoco cae en estereotipos mostrando a un jugador de barrio bonachón y desgraciado. El Trinche tiene 22 libros de filosofía, cita a Nietzsche, a Marx, a Sartre y a Simone de Beauvoir. El Trinche tiene convicciones férreas y las defiende y sobre todo no es perfecto: llegaba tarde a los entrenamientos porque le gustaba pescar, o quedarse en compañía femenina: “Jugar al fútbol no es un deporte, es un estado de ánimo. Uno juega o no juega y si no juega le cambia la vida. Y yo no quería otra vida que esa: jugar al fútbol”, decretará.
En una dupla de talentos actorales y gran presencia escénica sobre todo a través del trabajo con las voces, Ranzani sabrá ponerle un ritmo más vertiginoso a la historia mientras que El Trinche será todo sensibilidad y concentración, con una interpretación de Garófalo sin fisuras.
El espectáculo que lleva el sello Eines de principio a fin, tiene varios hallazgos que han surgido en los ensayos, instancia de creatividad fundamental para el director. De esta manera surgió la ocurrencia de Garófalo de interpretar canto lírico que va desde el Nessun Dorma de Turandot, Pagliacci, y una romanza incluida en la ópera L’ elisir d’amore con su bellísima voz; además de actor es cantante. Estas joyas clásicas convivirán con otra joya del rock como Blackbird de The Beatles, interpretada también en vivo.
Para los fanáticos de este deporte será una comedia romántica dedicada al fútbol, que de apoco deberá ir ajustando sus momentos mas cómicos para sacarle al público la risa que el texto merece. Para los seguidores del lenguaje teatral encontrar este tipo de transpolaciones de un mundo tan ajeno como el fútbol a las tablas será una experiencia para no desaprovechar.
“Mi deuda está saldada”
Eines sentado en uno de los cómodos sillones de un petit hotel de la ciudad no parece tener el metro noventa que efectivamente tiene. Al hablar gesticula con sus dedos largos y de vez en cuando zarandea su frondosa cabellera entrecana. Maestro de actores, escritor, filósofo y ahora nos enteramos, apasionado futbolero con El Trinche: el mejor futbolista del mundo.
“Lo que me inspiró a escribir esta obra fue mi lado romántico vinculado con esa parte del fútbol que se ha ido perdiendo. Acabo siendo devorado con temas sistémicos de rentabilidades, fama-prestigio, competitividad y sálvese quien pueda. Y eso no era el fútbol que yo amaba ni el que jugaba ni el que me gusta ver. Entonces creo que es algo que quiero decir del fútbol y de una manera de proceder con un alto contenido ético que hoy no se da. La obra puede gustar o no, pero mi deuda con el fútbol está saldada”
Uno de los momentos más emotivos es cuando la voz de Garófalo comienza a interpretar canto lírico. Según Eines “Lo de la ópera lo asocié con el tema You’ll Never Walk Alone que cantan los hinchas del Liverpool cuando el equipo sale a la cancha. Y se te pone la piel de gallina, es una de las tantas cosas emocionantes que suceden en el fútbol. Me pareció que hay algo en ese sonido que viene de la hinchada que germinó en el Trinche como ópera. Son parte de las licencias que nos hemos tomado para darle al personaje un valor subjetivo como yo pretendo”.
—¿Como fue tu primer encuentro con el Trinche?
—Aldo Prico, que es mi persona de confianza en Rosario, se ocupó de reunirme con el Trinche. Costó, porque El Trinche es escurridizo… pero Aldo lo consiguió y me dijo “He conseguido que veas al Trinche y te espera en un negocio de loteria a las tres de la tarde”. Fue algo muy loco, él estaba sentado en un banquito en un rincón de este negocio de barrio y yo lo reconozco por los videos y fotos pero quise encararlo por otro lado. Entonces le compré a la vendedora dos billetes de lotería de mi número favorito “El 17” y me acerque a él y le dije “Tomá Trinche uno para ti y otro para mí. Si ganamos la lotería lo festejamos... ¿vamos por un café?” Y así comenzó todo.