La tendencia se profundiza cada vez más: el empleo registrado que se crea en la era Cambiemos es monotributista, casi de forma excluyente. Ese precario sector representa el 69,1% del empleo registrado creado desde diciembre de 2015.
Desde noviembre de 2015 el empleo registrado creció un 2,24%. La cifra es bajísima, ya que sólo para acompañar el crecimiento vegetativo del mercado laboral se tiene que aumentar el trabajo registrado en un más del 1% por año. Pero todavía es peor si se hace el análisis por sectores. El empleo público, o grasa militante, creció el 0,62%. El trabajo privado registrado, o empleo de calidad, creció el 0,6%. Son cifras ruinosas que llevan a una pregunta: ¿qué tipo de trabajo registrado se está creando en la era Macri?
La respuesta la dan los datos oficiales del Ministerio de Trabajo. Entre noviembre de 2015 y febrero de 2018 la mayor creación de empleo registrado vino de la mano de las personas que sacaron el facturero. Los monotributistas a secas crecieron el 8,11% y los monotributistas sociales el 19,4%. Respecto del total del empleo registrado creado desde noviembre de 2015, los monotributistas suman el 69,1% de todo el nuevo trabajo. Siete de cada diez trabajadores que llegaron al empleo registrado en la era Macri son monotributistas.
La gravedad de la situación del mercado laboral se evidencia en la comparación con las cifras anteriores a la era Cambiemos. Tomando datos a partir de enero de 2012 (son los que se ofrecen oficialmente), el empleo registrado creció a un promedio mensual de 23.632 nuevos trabajadores en blanco, antes de Macri. Llegó Macri y esa cifra bajó a 10.005, menos de la mitad. Pero, para que se ubique la relevancia del monotributismo, si se quitaran del cálculo de trabajadores registrados a aquellos que viven del facturero, antes de Macri se hubieran creado 16.708 trabajos registrados por mes, mientras que después de Macri esa cifra sería apenas de 3.092. La diferencia se quintuplica.
Si durante la era Macri siete de cada diez nuevos trabajadores registrados son monotributistas, durante el período 2012 a 2015 esa cifra fue del 29,3% (o sea: tres de cada diez).
Y lo que Macri llama "empleo de calidad", el trabajo registado privado, también tenía un crecimiento más dinámico antes de la era Cambiemos. Sin Macri, se registraban 3.421 nuevos trabajadores en el sector privado por mes, en promedio. Llegó Macri y esa cifra se derrumbó a 1.398.
El monotributismo es el escalón más frágil del mercado laboral, a veces más precario que el trabajo en negro mismo. Encubre situaciones de desempleo (una persona saca el facturero después de perder su trabajo en relación de dependencia, por ejemplo) y también precariza una relación de dependencia, como le sucede a todos los contratados con el sector público que vienen facturando desde hace años y se les cortan los contratos en razón del avance del ajuste (Inti, Senasa, Agricultura Familiar, sólo por nombrar los últimos casos).