No es un título excesivo, es un indicador directo de la malaria. Durante la era Cambiemos el vino se volvió un artículo de lujo: las ventas están un 17,8% abajo de las de 2015. Cayeron en 2016, 2017 y están cayendo en 2018.
Las ventas de vino al mercado interno en junio de 2018 estuvieron un 8,9% abajo de las ventas de junio de 2017. En comparación con junio de 2015, la diferencia se estira al 19,5% para abajo. Cabe considerar que el período mayo a agosto es el de mejores ventas para el vino, que luego cede su lugar a la cerveza. Sin embargo, por lo que parece, el ancestral néctar de uva se ha vuelto un bien suntuario en la era Cambiemos.
En términos acumulados, las ventas en el primer semestre de 2018 estuvieron un 4,44% abajo del primer semestre de 2017. Si se compara con el mismo período de 2015, la diferencia negativa se estira al 17,8%. Junio de 2018 fue el segundo peor junio desde que hay registro (2009). El peor junio para las ventas de vino fue el de 2016. Sin embargo, en el acumulado del primer semestre, en la era Cambiemos año tras año se rompen los récords negativos. El tercer peor año para las ventas de vino fue 2016, el segundo peor año fue 2017. El primer semestre de 2018 es, ahora, el peor primer semestre. Todo indica que las malas noticias para los amigos del vino continuarán este año, según los datos oficiales del Instituto Nacional de Vitivinicultura.