La noche en vela

Aún previendo que el proyecto de ley de IVE no llegaría a juntar los votos que necesitaba, la gente celebró en la calle y esperó por la votación hasta casi las 3 de la mañana.

La espera se hacía larga cuando ya habían pasado casi 12 horas de sesión y el momento de la votación se recalculaba para horas cada vez más avanzadas. Terminar más tarde de lo pensado no estaba bueno, pero se lo sobrellevaba mayormente con alegría, si hasta había tiempo de bailar un tanguito en Callao y Corrientes.

 

Las primeras aguas que desde la tarde nunca pararon habían agarrado de sorpresa a muchas, aunque alrededor de las 20 ya casi no se veían cabezas circulando, sino que llegar a una esquina daba más bien a un desfile espectacular de paraguas.

Mientras del lado celeste iban llegando algunos banderones de Argentina, de Cristo Vence y hasta el mismísimo Bebito, los verdes apelaron a mantener los cuerpos bien aproximados o prender una fogata.

Un poco más de 16 horas de sesión para que, a las 2:44 del jueves, Gabriela Michetti, en su rol de presidenta del Senado, diera lugar a la votación. Hasta ese momento -y más también- la movilización verde fue pura energía, sobre todo, en vistas a lo que llegará dentro de no mucho tiempo.

Dejar respuesta

Por favor, ¡ingresa tu comentario!
Por favor, ingresa tu nombre aquí