Por ordenanza, se preservarán los lotes e inmuebles de los clubes. El municipio deberá realizar un relevamiento. Se apunta a la protección de las entidades menos pudientes.
La situación desesperante de muchos clubes santafesinos y la suba de los servicios (“tarifazos”) que propone el gobierno nacional desde que asumió en diciembre de 2015 provocan un desgaste natural en todas las personas que trabajan para sostener esas instituciones. Muchas veces los dirigentes deciden dar un paso al costado, algo que suelen hacer, en primer medida, los socios. Dejar de pagar la cuota social debido al “ajuste” que debe hacer cada ciudadano y ciudadana para llegar a fin de mes es una de las tantas medidas antipáticas que surgen a la superficie en tiempos de crisis. Muchas veces, ante esta situación económica y social, es muy probable que aterricen especuladores inmobiliarios para quedarse con los clubes.
Un proyecto
Debido a esta situación el concejal Leandro González impulsó una norma que destaca lo siguiente: desde ahora los lotes e inmuebles serán destinados únicamente a actividades deportivas y sociales, sin posibilidad a futuro de compra por parte de terceros. Con esta ordenanza que preserva a todos los clubes santafesinos, sin hacer distinciones según su poderío económico, se podrá proteger, por sobre todas las cosas, a las instituciones más pequeñas, las de escasas masas societarias y, por obvias razones, menos recursos.
Vale destacar que la norma fue aprobada por unanimidad el pasado 29 de noviembre en el Concejo Municipal de nuestra ciudad. Según el autor del texto, “el suelo o inmueble donde funciona cualquier entidad deportiva y social será destinado sólo para estas entidades, y en el futuro seguirán funcionando como tales; así se desarticula la posibilidad de venta de estos lotes o inmuebles donde hoy están radicadas”, explicó Leandro González.
En diálogo con la prensa, el concejal dijo que esta norma tiene como base argumentativa “la protección de todos los clubes de la ciudad, teniendo en cuenta lo que significan en la estructura de la sociedad, como ámbitos de contención y de preservación de valores tales como la solidaridad y el sentido de pertenencia”.
80 clubes
La ordenanza le encomienda al Ejecutivo un relevamiento detallado de los clubes santafesinos, pero en los fundamentos del proyecto original se busca una protección a los clubes menos pudientes. “En la ciudad funcionan alrededor de 80 instituciones ubicadas en distintos contextos barriales y con actividades diversas. Existen aproximadamente tres clubes y medio por kilómetro cuadrado, es decir un club cada 4890 habitantes y se encuentran emplazados en distintos distritos de zonificación, sin existir un criterio común para la gestión del suelo de los clubes deportivos de nuestra ciudad”, señaló el concejal.
Leandro González es un edil que viene trabajando en diversos aspectos vinculados a los clubes y al fortalecimiento del deporte como una mejora para nuestro desarrollo como sociedad. Sabedor de esta temática, afirmó: “Debemos tener clubes fuertes, y para eso hay que dar garantías de que en el futuro tendremos como piso la actual cantidad de clubes que hay en Santa Fe. Y, principalmente, que éstos no quedarán sometidos a ninguna especulación inmobiliaria o de otro tipo”.
Con esta norma se podrán evitar eventuales remates de un determinado club que se presenta en quiebra, pero además apunta al funcionamiento interno: “sirve para que una comisión directiva de un club que quiera vender (el lote o inmueble del club) no lo pueda hacer. Sí podría cambiar su razón social; en términos hipotéticos, ese club se pone de acuerdo con otra institución deportiva y forman un nuevo club, pero siempre tiene que seguir siendo una entidad deportiva. Esta ordenanza da ese tipo de garantías”, señala González.
Los datos
El cuerpo dispuso que el Ejecutivo Municipal realice un relevamiento de clubes de barrio en la ciudad de Santa Fe. Los clubes deberán acreditar domicilio en la ciudad, el inmueble en el que se desarrollen sus actividades, antigüedad mínima e ininterrumpida de un año en el desarrollo de las actividades, cantidad mínima de 25 asociados o beneficiarios directos de las actividades a desarrollarse.
“Es cierto que en ocasiones puede haber debilidades institucionales de los propios clubes ante algún tipo de presión especulativa. Es lo que queremos evitar”, agregó el edil frentista. Y también dijo que “hubo casos de clubes barriales muy chicos que debieron cerrar sus puertas. El único camino que va a quedar es solicitar una excepción al ROU sobre este cambio: si un particular (por ejemplo, interesado en adquirir el inmueble de un club) quiere comprar el lote o inmueble de un club, deberá presentar un procedimiento de excepción, aunque esto estará sometido a los dos tercios de los votos del Concejo, esto es, mayoría especial”.
Modificaciones
Yendo a lo más fino de la letra que regula esta ordenanza, en el despacho sancionado la normativa establece una modificación al Reglamento de Ordenamiento Urbano (ROU), que es la ordenanza “madre” que regula la zonificación de la ciudad, su organización distrital y su planificación a futuro.
Se incorpora al “Cuadro de Usos según Distrito” la figura “Clubes y Clubes Deportivos Barriales”. En consecuencia, se le asigna a las parcelas de dominio público o privado ocupadas con los equipamientos de carácter deportivo, social y cultural por parte de clubes deportivos el carácter Distrito E1 (Equipamiento Especial), “pudiendo desarrollar únicamente la actividad los Clubes y Clubes Deportivos Barriales”. Es decir: las entidades deportivas pasan a incluirse en el ROU como una nueva figura urbano-distrital, ahora protegida por normativa.