Los despachos de cemento son un indicador clave de la construcción. Ingresan en su séptimo mes consecutivo de caída. El ajuste del presupuesto 2019 va a impactar de lleno. Nunca se superaron las cifras de 2015.
Noviembre de terror para los despachos de cemento, lo cual indica que peor todavía lo deben estar pasando los obreros de la construcción. Los despachos tuvieron una caída interanual del 17,7% y son los más bajos desde 2009. En el acumulado de los once meses también se registra una merma del 1% internual. El año ya está prácticamente jugado por lo que el sector otra vez no podrá superar su marca máxima, la de 2015.
La caída de la construcción es otro indicador más de los resultados económicos del modelo Cambiemos. En ninguno de los tres años de gestión los despachos de cemento fueron superiores a los de 2015. Esta horrible performance no se revertirá el año que viene, sino todo lo contrario: será todavía peor, como consecuencia de la retracción en la obra pública que se espera como resultado del ajuste que ya está programado en el presupuesto 2019. En este sentido, este noviembre que pasó y sus cifras tan opacas auguran que la caída puede ser tan profunda como la que se produjo en 2016.