Por “competencia desleal”, la empresa radicada en Bell Ville, Córdoba, anunció que venderá sus máquinas y liquidará el stock a precio de costo. Su principal cliente, la petrolera estatal YPF, importó tres millones de pelotas desde China.
Mariano Privitera, dueño de la fábrica de pelotas de fútbol Priball, radicada en la localidad cordobesa de Bell Ville, informó a través de las redes sociales su decisión de bajar las persianas ante la “competencia desleal” por el ingreso masivo de productos de origen chino a precios imposibles de igualar en el mercado local.
La empresa Priball tenía como principal cliente a la petrolera estatal YPF, que decidió importar tres millones de pelotas para la promo #VeranoPerfecto dirigida a los socios de Serviclub. El cierre de la fábrica deja en la calle a 50 trabajadores.
A través de Facebook, Privitera confirmó el “desarme” de la empresa y la “liquidación de las máquinas y las 15 mil pelotas” que tienen en stock. Y le dedicó un párrafo especial al presidente Mauricio Macri: “Nos rendimos y bajamos los brazos, sabiendo que fuimos ninguneados, pero con el gusto de saber también que el mismo presidente Mauricio Macri tiene una de nuestras pelotas de adorno en su oficina. Lamentablemente, contemplarla no le ha servido para nada”.
En declaraciones al diario La Nueva Mañana, Privitera explicó que la “dolorosa decisión” se debe a la imposibilidad de competir contra los tres millones de pelotas importadas por el gobierno nacional, a través de YPF, provenientes de China principalmente.
“Nosotros podemos competir contra la marca de las tres tiras pero no contra el propio Estado”, señaló el empresario. “Comenzamos hace 13 años y siempre nos fue estupendo, pero desde que asumió Mauricio Macri, todo se vino abajo. Cero proteccionismo”.