Hay recesión para rato: según el último informe de pronósticos de crecimiento elaborado por el Banco Mundial, el producto bruto interno de nuestro país se contraerá 1,7%. El gobierno de Macri había estimado una caída del 0,5%.
Malas noticias para el gobierno de Mauricio Macri: el Banco Mundial estima que en 2019 el PBI argentino caerá 1,7% como consecuencia de la devaluación y la recesión. El cálculo del gobierno, incluido en el presupuesto sancionado a mediados de noviembre por el Congreso, estipulaba una caída del PBI del 0,5%.
Según el último informe de pronósticos de crecimiento elaborado por el Banco Mundial, “las tensiones comerciales, la debilidad en la actividad manufacturera y las crecientes presiones financieras en los mercados emergentes” afectarán en forma negativa a la Argentina.
Ese informe proyecta un crecimiento del 2,9% para la economía mundial durante 2019. Pero las estimaciones para nuestro país con peores de lo que inicialmente estimaba el gobierno de Cambiemos y el propio Banco Mundial.
De hecho, el organismo multilateral bajó en 3,5 puntos la previsión sobre la Argentina, ya que en su informe previo estimaba que en 2019 la economía de nuestro país iba a crecer 1,8%.
De acuerdo al informe del Banco Mundial, en la Argentina “la crisis monetaria y el endurecimiento asociado de las políticas monetarias y fiscales, junto con el efecto de una grave sequía en el sector agrícola, dieron lugar a una contracción de la actividad. El programa de austeridad fiscal (acordado con el FMI) será desafiante”.
“Se espera que la economía de la Argentina continúe contrayéndose en 2019, ya que la consolidación fiscal profunda conlleva una pérdida de empleo y una reducción del consumo y la inversión, a medida que las altas tasas de interés ponen en tensión los balances de las empresas y frenan la inversión privada”, agregaron desde el organismo internacional.