Las paritarias de la administración de la provincia y de los docentes públicos y privados tendrán su segundo capítulo mañana. El eje de la discusión es la combinación entre un aumento inicial y la cláusula gatillo.
Este jueves a las 9:30 el gobierno provincial se sentará a la mesa con los representantes de ATE y UPCN. Dos horas después, hará lo mismo con los de Amsafé y Sadop, junto a UDA y Amet (escuelas técnicas). En juego está el salario de 2019, después de un 2018 en el que la cláusula gatillo hizo reptar los sueldos al ritmo de la inflación, algo que desde el gobierno no dejan de recalcar: "los salarios de los trabajadores públicos de la provincia está actualizado y no perdieron prácticamente frente a la inflación del 2018", sentenció el ministro Pablo Farías después de la primera ronda de negociación paritaria.
Los sindicatos apuntan a que hayan aumentos iniciales y que luego la cláusula gatillo acompañe la inflación. La titular de Amsafé, Sonia Alesso, indicó a La Capital que "la cláusula gatillo no es la solución mágica, tiene que haber un adelanto para recuperar la inflación, porque en 2018 sufrimos una perdida de poder adquisitivo muy importante, junto a una suba tarifaria de servicios. Por eso en este contexto, decimos cláusula gatillo y suma importante". Desde ATE y UPCN apuntan a lo mismo: la obtención de un porcentaje de arranque y la continuidad de la aplicación de la cláusula gatillo. Pedro Bayúgar, de Sadop, afirmó que la cláusula gatillo "no es mágica", si bien afirmó que es "un reconocimiento que hay que hacer" y señaló que "no se dispara automáticamente, se dispara meses después, con el impacto de inflación. A esos aspectos hay que mejorarlos".
Antes del inicio de las paritarias, el gobierno envió señales de ponderación positiva de la cláusula gatillo, que llevó los salarios de los estatales al 45,5% en 2018. Sin embargo, Farías levantó la guardia e indicó que en la provincia "la curva de crecimiento de los ingresos está por debajo del crecimiento inflacionario". Ante UNO, anticipó que "este año va a ser muy difícil dar un incremento que adelante la inflación, sobre todo considerando que llegamos a la discusión paritaria con los salarios aumentados casi con el mismo porcentaje de la inflación del 2018. Con un salario actualizado pretender un porcentaje de arranque implica algo que creemos que va a ser muy difícil. Nosotros no vamos a adelantar nuestra propuesta porque lo vamos a hacer en el ámbito paritario. Pero va a ser muy difícil lograr satisfacer todos los intereses que se están planteando".