El gobierno nacional puso en venta las centrales termoeléctricas Ensenada de Barragán y Brigadier López. Una empresa integrada por Nicolás Caputo, el “amigo del alma” del presidente Macri, se presentó a las dos licitaciones. Hay una denuncia en la Justicia por la enajenación de activos públicos estratégicos “a precio vil”.
La Justicia investiga a Mauricio Macri, Juan José Aranguren y Javier Iguacel, además de una decena de empresario, a raíz de una denuncia de diputados nacionales de Unidad Ciudadana por el intento de privatizar “a precio vil” las centrales termoeléctricas Ensenada de Barragán (provincia de Buenos Aires) y Brigadier López, ubicada en el Parque Industrial de Sauce Viejo, en la provincia de Santa Fe.
De acuerdo a la denuncia presentada por los diputados Rodolfo Tailhade, María Emilia Soria, María Fernanda Vallejos y Adrián Grana, la intención del gobierno nacional es vender ambas centrales eléctricas por una cifra que es casi 400 millones de dólares menos del valor real de las usinas construidas durante el kirchnerismo.
El proceso de privatización comenzó en noviembre de 2017 cuando el Poder Ejecutivo publicó el decreto 882/17, firmado por el presidente Macri, el jefe de Gabinete de la Nación, Marcos Peña, y el entonces ministro de Energía, Juan José Aranguren. En junio de 2018, en su última medida al frente del ministerio, Aranguren aprobó los pliegos para la licitación pública nacional e internacional de las dos centrales.
Central Puerto, la única empresa en carrera para quedarse con la Brigadier López está integrada por Guillermo Reca, Eduardo Eskasany y Nicolás Caputo, el “amigo del alma” del presidente Macri y ex vicepresidente del PRO a nivel nacional. Según el sitio Econojournal, Caputo posee solo el 4% de ese paquete accionario de la firma.
La empresa de la que forma parte el “amigo del alma” de Macri participa a la vez de la licitación de la central de Ensenada de Barragán, a la que también se presentó YPF Luz.
Denuncia judicial
La causa abierta por la denuncia de los legisladores de Unidad Ciudadana está a cargo del juez Daniel Rafecas y del fiscal Gerardo Pollicita. Además de Macri, Aranguren y su reemplazante Iguacel, también están bajo la lupa el presidente de Ieasa, Mario Dell Aqua; el director ejecutivo y gerente de termoeléctricas de Ieasa, Alberto Raúl Brusco; el gerente de control de proyectos de Ieasa, Adolfo Marcelo Piccinini; el ex presidente de Enarsa, Hugo Balboa; y el empresario Ángelo Calcaterra, dueño de Iecsa, una histórica empresa del Grupo Macri.
La denuncia hace eje en los montos que pretende recaudar la Nación por la venta de las termoeléctricas. La central de Ensenada de Barragán fue tasada por el Estado en 305,9 millones de dólares y el monto mínimo de oferta en efectivo es de 229 millones de dólares. La Brigadier López tiene una valuación oficial fue de 207 millones de dólares con un mínimo de oferta en efectivo de 155 millones de dólares. En total, según los denunciantes, son casi 400 millones de dólares menos que el valor real de las usinas.
Dos centrales eléctricas en venta, la última medida de Aranguren
En el texto que acompaña la denuncia, los legisladores se preguntan: “¿Cómo puede admitirse que el Estado enajene activos públicos estratégicos por casi 267 millones de dólares menos (Ensenada de Barragán) y 110 millones de dólares menos (Brigadier López) de lo que valían en 2012?”.
Los propios resultados operativos financieros publicados por Enarsa, relativos a las dos usinas, muestran que el Estado está enajenando dos centrales rentables “a precio vil” para beneficiar a Caputo y a sus socios en Central Puerto: Guillermo Reca y Eduardo Eskasany. Sin deducir impuestos, la central de Ensenada de Barragán en 2017 registró una ganancia de 121,4 millones de dólares y la Brigadier López 62 millones de dólares.