En marzo las ventas medidas por unidades cayeron un 11,3%. Van cinco meses de caídas de dos dígitos. Desde la crisis de 2001 que no se ve una racha tan horrible. Fue el peor marzo desde que hay registro (2009). En la comida el consumo pasó de las segundas a las terceras marcas.
Las ventas en los comercios minoristas volvieron a caer el mes pasado, debido a que "Las familias tienen altos niveles de deuda, y por las altas tasas de las tarjetas, los consumidores evitan adquirir a crédito disminuyendo las cantidades compradas". Este panorama pinta el informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), que indica una caída interanual del 11,3% en las ventas de marzo de los comercios minoristas. Ese bajón brutal viene precedido por las mermas del 11,9% en febrero, 10% en marzo, 9,9% en diciembre y 15,4% en noviembre.
Todos los rubros tuvieron caídas verticales, en algunos casos se hace inexplicable la sobrevida de los comerciantes. Por dar un ejemplo, los más sufridos en marzo fueron los comercios de Materiales para la construcción (-17%), Bijouterie (-16,9%), Joyerías y relojerías (-16,8%), y Bazar y regalos (-16,5%).
Algunas descripciones del informe de Came son esclarecedoras. Se señala que en los alimentos y bebidas los consumos ya se han pasado de las segundas a las terceras marcas. También que hay un declive la compra de bebidas, carnes, fiambres y lácteos. La compra de comida cayó un 5,4% anual. En indumentaria –los negocios de la peatonal– las ventas se derrumbaron un 10,7%. Ni siquiera el comienzo de clases incidió en las casas de juguetes y artículos de librería, cuyas ventas de marzo cayeron un 11,8%.