La malaria es cada vez más profunda. El 42,3% de la maquina industrial está apagada. Nunca durante la era Cambiemos siquiera se llegó a una utilización del 70%. Desde diciembre de 2018, la parálisis está en los mismos niveles de la crisis del 2001.
El Indec difundió los datos sobre la utilización de la capacidad instalada industrial. Las penurias no ceden. Apenas el 57,7% de las máquinas estuvieron operativas en marzo, un porcentaje inferior al de marzo de de 2003. Hay que ir hasta marzo de 2002 para encontrar una cifra inferior, en la comparación con un mismo mes. Desde diciembre, las cifras vienen siendo muy preocupantes: 56,6%, 56,2% en enero, 58,5% en febrero y ahora 57,7%.
Quienes pagan directamente los costos son los trabajadores: desde que llegó Macri al gobierno la cantidad de trabajadores registrados de la industria cayó más del 10%. En marzo del año pasado, la utilización de la capacidad instalada industrial estaba en 66,8%. También es un porcentaje pésimo, pero es mucho mejor que el de la situación actual.
Según el Indec, los bloques sectores que presentan, en marzo de 2019, niveles de utilización de la capacidad instalada superiores al nivel general son: refinación del petróleo (76,6%), papel y cartón (71,1%), sustancias y productos químicos (69,6%), industrias metálicas básicas (64,8%), productos del tabaco (63,8%), productos minerales no metálicos (62,4%) y edición e impresión (58,1%). Mientras que los bloques sectoriales que se ubican por debajo del nivel general de la industria son: productos alimenticios y bebidas (55,7%), productos textiles (49,8%), productos de caucho y plástico (48,7%), la industria metalmecánica excepto automotores (43,1%) y la industria automotriz (35,0%).
Todos los sectores registran caídas en la utilización de sus capacidades instaladas, en la comparación con marzo de 2018.