El vino es uno de los indicadores más claros de la malaria del modelo Cambiemos. Actualmente, la cantidad de litros vendidos es 24,8% menor a la de 2015.
Las ventas de vino en el mercado interno cayeron un 7,09% en junio respecto del mismo mes de 2018. En el acumulado del primer semestre marcan una ínfima suba del 0,53%. Cabe destacar que 2018 fue el año con las ventas más bajas de vino desde que el Instituto Nacional del Vino llega sus registros (2009).
La estadística contempla todos los tipos de vino y de envase. El semestre venía siendo inusitadamente positivo para el sector, junio es apenas el segundo mes a la baja. Sin embargo, enciende una luz de alerta dado que los meses invernales conforman la temporada alta de ventas del elixir.
En la comparación con 2015 se ven los efectos de la economía macrista. En junio, las ventas de vino estuvieron 24,8% abajo de las de junio de 2015. Comparando el primer semestre de 2019 con el primer semestre de 2015, la merma llega al 16,89%. Son cifras de quebranto, sobre todo si se considera que nunca ningún año de la era Cambiemos alcanzó las ventas de 2015. En 2016 la caída interanual respecto de 2015 fue de 8,3%, en 2017 la baja interanual fue de 5,22%, en 2018 fue de 6,33%. Al momento, 2019 va llevando esta pequeña suba de 0,54%. Ojalá el sector al menos no se siga hundiendo todavía más durante el año electoral.