Desde que llegó Cambiemos, bajaron su persiana 19.157 empresas y perdieron su trabajo registrado privado unas 128 mil personas. Cerraron tres industrias por día, su cantidad de trabajadores en blanco cayó más del 10%.
Pese a las repetidas arengas al mercado y al empresariado, desde que Mauricio Macri llegó a la presidencia la cantidad de empresas se achicó un 3,37%, mientras que el trabajo registrado privado, en general, se redujo un 2%. Cambiemos va a dejar una economía privada más chica que la que recibió, inexorablemente.
La comparación surge de los datos oficiales de la Secretaría de Trabajo y de la AFIP, que solamente reflejan la situación de la economía formal: hay un tercio de la actividad, no registrada o en negro, que cae fuera de su radar. Difícil es suponer, de todos modos, que haya prosperado.
En números absolutos resalta la tenebrosa realidad. Entre noviembre de 2015 y abril de 2019, último dato disponible, hay 19.157 empresas menos, de todo tamaño. En trazo grueso, eso quiere decir que por mes el sector privado perdió 467 empresas, un poco más de 15 día. Visto del lado de los trabajadores, son más de 128 mil que perdieron su laburo en blanco desde que Macri se hizo del poder, unos 3124 por mes. Cabe recalcar que el mercado laboral tiene que crecer un mínimo de 1,5% por año para acompañar el mero crecimiento de la población. Con Cambiemos no sólo no creció sino que se redujo un 2%. Hay que ir hasta octubre de 2014 para encontrar una cantidad de trabajadores registrados privados menor que la de abril de 2019.
Por donde se mire, el sector privado fue dinamitado por el modelo que pretende acelerar su paso de ser reelegido. Pero no en todas las ramas el impacto el mismo: las más afectadas son las que le imprimen dinamismo e independencia a la economía.
Romper el desarrollo
La industria es la gran víctima de Mauricio Macri. El retraso es fenomenal. Fuera de los cierres más rimbombantes, como el de la fábrica de motos Zanella en Mar del Plata, para nombrar uno de los más recientes, la síntesis que ofrecen los datos duros configura el cuadro general de situación.
Desde la llegada de Cambiemos, la cantidad de industrias se redujo un 7,23%. Hay 4070 industrias menos que en noviembre de 2015. Quiere decir que cerraron tres industrias por día. Sólo durante el último año –abril de 2019 en comparación con abril de 2018- el número de industrias descendió 3,11%. El correlato con la cantidad de trabajadores registrados industriales es directo: se redujo un 10,9% la cantidad de trabajadores registrados de la industria desde que llegó Macri al poder. Considerando el período 2009 a 2015, se sumaban 899 trabajadores registrados a la industria por mes. Llegó Macri y unos 3334 trabajadores industriales perdieron su trabajo cada mes, en promedio.
El comercio, la hotelería y los restaurantes conforman un sector que suele acompañar el crecimiento vegetativo de la población. No es así con el modelo Cambiemos: cayó un 1,9% la cantidad de trabajadores registrados en esos rubros, en la comparación con 2015.
El rubro “Comercio al por mayor y menor y reparación de vehículos automotores” es un renglón de las mediciones de AFIP. Son los negocios del barrio, pero también es el Wal Mart. Se cerraron 6055 de esos negocios desde noviembre de 2015, 5359 se perdieron en el último año. Es una merma del 3,79% en la cantidad de negocios abiertos. Como una prueba de la crisis desatada en 2018, una indicación: en el último año, el cierre de comercios fue 3,37%. Toda la malaria que gestó el gobierno Macri se desató en los últimos meses.
En el sector de empresas más afectado es el de “transporte y almacenamiento”. Se destruyó el 10,84% de ese sector. Unas 5183 empresas de ese rubro cerraron desde noviembre de 2015.
Más precario
Hay apenas 71.914 trabajadores registrados más -en todo concepto: públicos, privados, autónomos, monotributistas, trabajo doméstico- que los que había en noviembre de 2015. Inevitablemente, la gestión Cambiemos terminará con menor cantidad de trabajadores registrados que los que recibió: sólo en el último año 203.933 personas perdieron su trabajo registrado. Observando en detalle, lo único que salva las cifras es la cantidad de personas que se incorporaron al monotributo: son el 50,4% del empleo creado desde que Macri llegó al poder, mientras que el 90,2% del trabajo registrado destruido es aquel que se insertaba en empresas privadas. No hay forma más perfecta de plasmar en datos duros el proceso de precarización laboral que acompaña al aumento de la desocupación producido por el cierre masivo de empresas.