—¿Buenas, cómo anda? No lo veo triunfante para nada…
—¿Y Boston? Tampoco es como para andar haciéndose los nuevos.
—Bueno, pero festejemos la fiesta de la democracia… no le digo que ando con perro con dos colas, pero un poco de alegría tengo. No puedo transmitirle, pero algo bueno me pasó. Y no tiene que ver con los resultados.
—No sé cómo hace para encontrar alegría con el retorno al pasado. Segundas partes nunca son buenas.
—En principio, siempre es mejor discutir con personas que se sientan con las Abuelas y las Madres.
—Yo no puedo sentarme con quienes acuerdan con iraníes y venezolanos para desestabilizar la región y entregarla a soviets alienígenas que vienen a invadirnos.
—Para mí cada país es soberano y hay que respetarlo. Ahora, pensar en comandos venezolanos ya me parece demasiado.
—Lo de los alienígenas ¿no?
—Pensé que era una metáfora.
—No, no... es más real que su esperanza. Recuerde: las segundas partes no son buenas.
—Mmm, en este caso sería una saga e iría por el cuarto.
—Ojo, que no sea una precuela.
—Ah bueno, tanto resentimiento… ¿en serio? ¿Es corredor de bolsa para estar tan angustiado?
—No estoy angustiado… apenas ganaron. ¡Vamos a volver!
—Todo rompen, una que sea de ustedes no tienen.
—Lilita, ella es nuestra. Y vamos a volver a volver… a volveeer.
—Lilita dice que se toma vacaciones.
—Lilita no se va, siempre estará en el tweet de nuestro pueblo. Es como Evita pero creada por Marvel.
—Hasta que un día el paisane acabe con este infierno y, haciendo suyo el gobierno, con solo esta ley se rija: o es pa’ todos la cobija, o es pa’ todos el invierno.
—Falta que repongan 678...
—Usted tiene menos reflejos que Chano luego de un dúo con Horacio Guaraní.
—Menos grieta y más pala, que yo no le pago la luz a nadie más.
—A quién le va a pagar si abona la suya en cuotas.
—Yo soy del Partido del Lomo… si no trabajo, no como.
—Pero si trabaja en el Estado…
—Menos rosca y más ideas que el Estado somos todos y todas.