Crece en Polonia una oleada fundamentalista y más de 90 regiones ya se declaran como “zona libre de personas LGBT”.
Homofobia institucionalizada. En Polonia un número considerable de gobiernos locales ha declarado a sus regiones como "zonas libres de personas LGBT" mediante la aprobación de normativas que sirven para estigmatizar y excluir.
El fotógrafo Przemyslaw Stefaniak ha iniciado un proyecto fotográfico en un intento de mostrar los efectos de la vida real de estos actos legales-simbólicos. "Aunque las zonas son reales, la señal de tráfico está preparada por mi para poner un rostro humano a la cruel legislación homofóbica. El proyecto de zona libre de LGBT está destinado a ser leído como una visualización de la nueva ley introducida en Polonia y para crear conciencia sobre la violación de los derechos LGBT en esas áreas tanto a nivel local como internacional", señala en su página web.
"Las declaraciones hechas por los municipios son actos de oposición a la igualdad, el respeto y la tolerancia", explica Stefaniak. "Los ayuntamientos o provincias los pasan bajo el pretexto de defender los valores cristianos, las escuelas y el modelo familiar tradicional contra la influencia de la llamada ideología LGBT".
En diciembre de 2019, el Parlamento de la Unión Europea condenó enérgicamente las "zonas libres de LGBTI" en Polonia y declaró claramente que Polonia debería revocar las resoluciones que atacan los derechos de ese colectivo.
A continuación el texto completo que da "fundamento" a la normativa homofóbica en la ciudad de Lublin:
Declaración de la Asamblea Regional de la Ciudad con respecto a la introducción de la ideología LGBT a las comunidades del gobierno local.
La Asamblea Regional de la Ciudad expresa su oposición contra las acciones destinadas a promover la ideología de los movimientos LGBT que han estado ocurriendo en la esfera pública. Los objetivos de esta ideología violan los derechos y libertades básicos garantizados en los actos del derecho internacional, impugnan los valores protegidos por la Constitución polaca e interfieren en la autonomía de las comunidades religiosas.
Las acciones recientes emprendidas por representantes de la escena política nacional y local tienen como objetivo causar cambios fundamentales en la vida social. Estas acciones están destinadas a aniquilar los valores formados por la Iglesia Católica, tales como: búsqueda de la verdad, preocupación por el desarrollo moral de la generación joven, preocupación por la institución de la familia y una escuela basada en principios cristianos.
Por lo tanto, teniendo en cuenta el mejor interés de una persona y una familia, declaramos que:
- Defenderemos nuestras escuelas y nuestras familias contra la difusión de la ideología que se opone a los valores cristianos.
- No permitiremos introducir los elementos de educación sexual basados en los estándares de la OMS en el sistema educativo polaco.
- No permitiremos que los oficiales de corrección política (los llamados ‘fareros) se instalen en las escuelas, ya que está en conflicto con la ley y el bien de nuestros hijos.
- No permitiremos ejercer presión administrativa para cumplir con la corrección política (correctamente referida como homopropaganda) en profesiones seleccionadas (maestros, científicos, empresarios, abogados).
- Declaramos que la Asamblea Regional de Lublin, al realizar sus deberes públicos, siempre será fiel a la tradición nacional y estatal, recordando la tradición milenaria del cristianismo en Polonia y el compromiso centenario del pueblo polaco con la libertad.
Polonia y las zonas libres de razón
Esteban Paulón, militante por los derechos del colectivo LGBTI y ex subsecretario de Diversidad Sexual de la provincia, publicó un texto reflexionando sobre esta situación en el que señala: "La pretensión totalitaria de construir mundos y sociedades “libres de” determinados grupos sociales no es nueva. Y claro que no la inventó Polonia, aunque sí fue protagonista de la más atroz de las aventuras genocidas: el Holocausto".
"Justamente en Polonia se localizaron algunos de los más grandes campos de concentración del nazismo. La liberación por parte de las tropas soviéticas de uno de ellos, el de Auschwitz-Birkenau hace 75 años, dio origen al Día de conmemoración de las víctimas del Holocausto que recordamos cada 27 de enero. A pesar de tanto dolor, tanto odio y tanta violencia, pareciera que aún no aprendimos nada".
🏳️🌈Sabías que en #Polonia varios municipios y regiones se declararon "Zona libre de personas #LGBT+"? En esta nota comparto mi opinión y algunas ideas 💪🌈 https://t.co/QdQPU0yQ9F pic.twitter.com/ENvahnyExb
— Esteban Paulón 🌈💚 (@epaulonlgbt) February 5, 2020