Imágenes satelitales muestran la caída de los gases contaminantes en la atmósfera de Córdoba, Capital Federal y su conurbano. La medición compara los días previos y posteriores a la imposición del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
La cuarentena obligatoria generó un efecto inesperado: la disminución de los niveles de contaminación atmosférica en grandes centros urbanos de la Argentina, debido a la menor circulación de tránsito y de emisiones de la industria. Mapas elaborados por la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) en base a imágenes satelitales muestran la notable disminución de dióxido de nitrógeno (NO₂) durante los primeros días posteriores al aislamiento social, preventivo y obligatorio, en comparación a las jornadas previas.
Los mapas de la CONAE muestran una escala de la abundancia de NO₂ detectada por el sensor TROPOMI a bordo del Satélite Sentinel-5P de la Agencia Espacial Europea (ESA), medida en micromoléculas por metro cuadrado (mol/m²). Los puntos más dispersos geográficamente en tonos amarillos indican contaminantes transportados por las condiciones meteorológicas presentes.
El NO₂ es un contaminante atmosférico que se produce cuando el monóxido de nitrógeno (NO) emitido por la quema de combustibles fósiles entra en contacto con el oxígeno del aire. Por esta razón se lo asocia al tránsito vehicular, aéreo y a algunas actividades industriales. Principalmente genera impactos en la salud de la población a nivel de sistema respiratorio. Además guarda relación con el calentamiento global, por lo cual es un importante aporte en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible planteados por las Naciones Unidas en la Agenda 2030.