Según el observatorio de la organización Mumalá, hubo 1440 femicidios y travesticidios en el país desde el 3 de junio de 2015, cuando se realizó la primera marcha Ni Una Menos. Durante este año se produjeron 126 crímenes, el 68% dentro de la vivienda de la víctima. En la provincia se registraron 12 femicidios en lo que va del 2020.
El femicidio de Chiara Páez, en la localidad de Rufino, desató en 2015 el hartazgo y un grito masivo de dolor y lucha urgente: Ni Una Menos. Este crimen tocó alguna fibra sensible en la sociedad por aquellos días que hizo que el caso no pasara desapercibido. Era hora de salir a las calles, de decir basta, de pedir a gritos que alguien haga algo. La palabra “femicidio” se instaló en los medios, en las casa, en las plazas, en las calles.
Hoy, cinco años después, las estadísticas siguen marcando, horas más, horas menos, lo mismo: casi todos los días -cada 29 horas- se produce un femicido en nuestro país. Las movilizaciones siguen siendo masivas, la organización feminista no para de crecer, pero las políticas estatales siguen lejos, muy lejos, de dar una respuesta certera y eficaz ante esta problemática devastadora.
Desde ese 3 de junio de 2015 a la fecha, el Observatorio de la organización Mujeres de la Matria Latinoamericana (Mumalá) registró un total de 1440 femicidios (directos, vinculados, travesticidios). Los números de este año, desde el 1 de enero al 30 de mayo, se registraron 140 muertes violentas de mujeres, de las cuales 124 fueron femicidios y dos de ellas, travesticidios (hay otras 16 muertes violentas que están en proceso de investigación). De esta cifra se desprende el dato de que en Argentina una mujer es asesinada cada 29 horas.
Así mismo se registraron 112 intentos de femicidios, y 151 niños, niñas y adolescentes se quedaron sin madre.
En la provincia de Santa Fe, en tanto, la organización reportó 12 femicidios en lo que va del año, cinco de ellos ocurrieron durante el aislamiento social y obligatorio. El informe también indica que durante este año hubo cinco intentos de femicidio en la provincia.
Según el registro de Mumalá, el 41% de los femicidas era pareja de la víctima y el 22% ex pareja. Además, el 15% de los agresores se suicidó, y el 4% lo intentó. Hay un 9% que se encuentra prófugo y el 6% asesinó a más de una víctima.
El 20% de las mujeres víctimas de femicidio había denunciado a su agresor previamente, el 10% tenía restricción de contacto o perimetral, y el 1% botón antipánico. En el 44 % de los casos víctima y victimario convivían.
La organización también discriminó los datos de crímenes desde el 12 de marzo, momento en que comenzaron a publicarse en el boletín oficial las restricciones de circulación y aislamiento por la pandemia de Covid 19.
En este contexto, se registraron 71 muertes violentas de mujeres de las cuales: 61 son femicidios y 10 muertes se encuentran en proceso de investigación. Hubo además 57 intentos de femicidios y dos intentos de travesticidios.
"Los femicidios son los únicos delitos que no descendieron en el período de cuarentena. Es por ello que estamos exigiendo la urgente declaración nacional de #EmergenciaNiUnaMenos, con medidas concretas y presupuesto sensible a las políticas de género", señalaron desde Mumalá. "Hoy, igual que aquel 3 de junio de 2015, exigimos al Estado que priorice recursos para la atención integral de mujeres e integrantes del colectivo LGBTIQ+ y promoción de políticas públicas para prevenir, sancionar y erradicar las violencias".
Los números de la Corte
La Oficina de la Mujer (OM) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación difundió el Registro Nacional de Femicidios correspondiente a 2019 e informó que, del 1 de enero al 31 de diciembre, se registraron 268 femicidios (directos y vinculados) y 5 transfemicidios y travesticidios. Este registro es el que el Poder Ejecutivo toma como oficial.
La cifra "revela la violación sistemática a los derechos humanos de las mujeres en nuestro país", aseguró Elena Highton de Nolasco, vicepresidenta de la Corte y responsable de la OM.
Según este relevamiento, hubo 252 víctimas directas de femicidios y 16 de femicidio vinculado (personas asesinadas como forma de infligir dolor a una mujer). El 66% de los femicidas eran pareja o ex pareja de las víctimas.
"La definición que utilizamos para dar cuenta de la letalidad de la violencia contra las mujeres es más amplia que la de nuestro Código Penal vigente. Utilizamos la del Comité de Expertas de la Convención Belém do Pará (CEVI) y, además, incluimos femicidios vinculados. Por esta razón, quienes recaban los datos en las provincias lo hacen a partir de la lectura de las causas desde la perspectiva de género", resaltó la jueza.