El gremio de la docencia universitaria participó del acuerdo paritario que garantiza la toma de exámenes respetando los derechos laborales de las y los trabajadores de la educación.
Esta es semana de exámenes en la Universidad Nacional del Litoral. El contexto de la pandemia demandó la redefinición de las condiciones laborales en que se llevarán a cabo las mesas examinadoras, desarrolladas de manera virtual. En ese sentido, la Asociación de Docentes Universitarios del Litoral (Adul) suscribió un acta acuerdo con el Consejo Superior de la UNL para establecer pautas que respeten, entre otros, el derecho a la desconexión y la garantización de los medios tecnológicos para poder llevar adelante la tarea de evaluación.
Oscar Vallejos, secretario general del gremio, apuntó a que el acuerdo resulta del “acumulado de la experiencia” de haber dado clases virtuales en el contexto del aislamiento general, preventivo y obligatorio. “Aparece como una cuestión central que nos había llevado a buen puerto el de establecer el derecho a la libertad de cátedra como un derecho político que también se convirtió en un derecho del trabajo, organizador, en el cual se establece que quienes deciden sobre los contenidos, sobre cómo esos contenidos se instrumentan y se secuencian y qué certificación se pide de esos contenidos, es el equipo de cátedra”, detalló el referente.
El consenso acerca de la libertad de cátedra para establecer los mecanismos para las clases virtuales, se refrendó en el acuerdo acerca del período de evaluación. “Son las cátedras las que resuelven las modalidades de exámenes de acuerdo a las condiciones pedagógicas que establezcan”, apuntó Vallejos.
Para el secretario general del sindicato, este acuerdo contiene "elementos muy importantes de reconocimiento de derechos de la docencia". "Lo que se ve es que el reconocimiento de las condiciones de trabajo de la docencia se ponen como garantía del cumplimiento del derecho de las y los estudiantes a rendir exámenes. Creo que ese es el equilibrio que el acta paritaria logra", opinó.
El acta, suscripta el 24 de julio, establece en diez artículos los acuerdos relativos a la toma de exámenes parciales y finales mientras dure el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Tal resolución “tiene un carácter transitorio, dado que las formas de exámenes virtuales no pueden reemplazar en ninguna circunstancia la toma de exámenes presenciales que es la modalidad regular en la que se evalúa a las y los estudiantes en la Universidad Nacional del Litoral y no puede extenderse más allá de la emergencia sanitaria”, indica el documento.
Los fundamentos de la misma incluyen normativa de la UNL relativa a toma de exámenes, pero además el Artículo 14 bis de la Constitución Nacional que establece el derecho a condiciones dignas y equitativas de trabajo, el Convenio OIT 177 y su recomendación N° 184 y el Convenio Colectivo de Trabajo para docentes de Universidades Nacionales promulgado por Decreto 1246/2015. En ese sentido, si bien es un instrumento de carácter académico, también refiere a la docencia como un colectivo de trabajadoras y trabajadores cuyos derechos deben ser garantizados.
"Este acumulado tiene que ver con dos cuestiones centrales: que el horizonte organizador tenía que ser la libertad de cátedra transformada en un derecho del trabajo y el tema del tiempo como condición central, el derecho a la intimidad y a la desconexión", señaló Vallejos. "Desde Adul hicimos una asamblea específica para tratar el tema de los exámenes y allí salieron distintos puntos que se ven reflejados en el acta paritaria", comentó.
El contenido del acta
El acta paritaria sobre los exámenes parciales y finales establece que "las metodologías seleccionadas contemplarán el derecho a la accesibilidad física, comunicacional y académica de personas con discapacidad, ya sean docentes y/o estudiantes y contemplarán las condiciones de los grupos de riesgo".
Para garantizar el derecho a la desconexión de la planta docente, cada dos horas se hará un corte de entre 15 y 30 minutos de acuerdo a la decisión del tribunal examinador. Debe haber un plazo máximo razonable de conectividad que cada tribunal examinador establecerá y comunicará de manera fehaciente al equipo de gestión para la organización general de la mesa de examen.
La UNL también pondrá a disposición el equipamiento y/o conexión necesaria para aquellos docentes que no cuenten con el mismo y lo comuniquen de modo fehaciente. En caso de no ser posible, la universidad habilitará espacios bioseguros conforme los protocolos vigentes para que se produzca la toma de exámenes.
Además, tanto en el nivel preuniversitario como universitario, se suspenden las clases mientras dure la toma de exámenes.
Por otra parte, la Universidad Nacional de Litoral se compromete a habilitar, en la medida que las condiciones sanitarias y ambientales lo permitan, además de la sede de la Unidad Académica correspondiente, alguna de sus dependencias académicas para la sustanciación de exámenes parciales y/o finales conforme los lineamientos fijados en la presente Acta.
Asimismo, la Universidad podrá habilitar espacios físicos en otras ciudades de la provincia de Santa Fe o limítrofes, para el caso que se consigan las mismas habilitaciones y condiciones, a través de convenios ad-hoc con instituciones locales para evitar los traslados de larga distancia, minimizando los riesgos.