Como otros 7.279.000 estadounidenses, el presidente y la primera dama dieron positivo de coronavirus. Previamente, la asesora Hope Hiks había dado el positivo. A pocos días del segundo debate y a un mes de las elecciones, se complica severamente la campaña republicana. ¿Qué pasa si muere?
La preocupación comenzó a correr ayer por la mañana cuando el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, avisó vía Twitter que su asesora Hope Hicks había dado positivo de coronavirus. Con la desaprensión habitual que mostró Trump durante toda la pandemia, su entorno nunca cumplió con medidas de cuidado. Hicks había viajado varias veces esta semana a bordo del Air Force One junto a Trump, la última este miércoles a Minesota, para un acto electoral.
Here's Hope Hicks with Jared Kushner, Stephen Miller, Dan Scavino, and Nicholas Luna -- none of them wearing masks -- on their way to board a helicopter on Wednesday, hours before Hicks tested positive for coronavirus (Getty Images) pic.twitter.com/v1hFLjg06x
— Aaron Rupar (@atrupar) October 2, 2020
La advertencia lanzada por Trump ayer a las 11:44, hora Argentina, terminó volviéndose realidad hoy a las 1:54 hora local cuando salió el aviso del testeo positivo del presidente y la primera dama.
Tonight, @FLOTUS and I tested positive for COVID-19. We will begin our quarantine and recovery process immediately. We will get through this TOGETHER!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 2, 2020
As too many Americans have done this year, @potus & I are quarantining at home after testing positive for COVID-19. We are feeling good & I have postponed all upcoming engagements. Please be sure you are staying safe & we will all get through this together.
— Melania Trump (@FLOTUS) October 2, 2020
El panorama electoral toma un nuevo cariz con el anuncio, ya que en 13 días debía realizarse el segundo de los tres debates electorales, de cara a las elecciones del 3 de noviembre. Trump entra en aislamiento obligatorio, parte de su entorno seguramente también. Además, el manejo de la pandemia de Covid 19 toma, naturalmente, el centro de la escena y del debate, desplazando los tópicos que quería imponer el líder republicano.
Como 7.279.065 estadounidenses contagiados, de los cuales 207.816 murieron por la enfermedad, Donald Trump se suma a la serie de mandatarios negacionistas que contrajeron del virus, como Boris Johnson –quien luego, del susto, cambió de parecer– y Jair Bolsonaro, el azote de Sudamérica.
No hay marco legal para determinar la continuidad del proceso electoral en caso de que Donald Trump muera. Por principio, queda en manos del partido Republicano la determinación de un nuevo candidato para las elecciones, mientras que Mike Pence, el vicepresidente, pasa a ser presidente. Si Trump muriera durante la conformación del Colegio Electoral –recuérdese que en Estados Unidos hay una democracia indirecta–, el principio es el mismo: el partido puede nominar un nuevo candidato. Para hacerlo, está el Comité Nacional Republicano, con 168 miembros, representando los estados y territorios de Estados Unidos, que deben votar por la nueva propuesta.
Mientras tanto, Joe Biden, el candidato de los Demócratas, avisó que hoy se hará el test de coronavirus. Por protocolo, durante el primer debate no se realizó el tradicional saludo de manos entre los contendientes.
Donald Trump, 30 de septiembre, riéndose de Biden: "Siempre que le veo lleva una mascarilla enorme, aunque esté a cien metros de distancia".
Donald Trump, 2 de octubre: positivo por coronavirus. pic.twitter.com/AAcDeEvIex— El HuffPost (@ElHuffPost) October 2, 2020