La diputada provincial del socialismo hizo un balance negativo del primer año de Perotti y remarcó que “el contrato electoral de paz y orden está lejos de cumplirse”. También destacó el trabajo transversal de las legisladoras para lograr la sanción de la ley de paridad.
La diputada provincial Gisel Mahmud (PS-Frente Progresista) opinó que “es urgente salir de la grieta que consume diariamente al país” y opinó que la provincia de Santa Fe “necesita referencias nacionales en el Congreso que puedan defender los intereses de todos”.
En una extensa entrevista con Pausa, la joven legisladora socialista hizo un balance negativo del primer año de gobierno de Omar Perotti y remarcó que “el contrato electoral de paz y orden con el que ganó las elecciones está lejos de cumplirse”. También destacó el trabajo transversal de las legisladoras para lograr la sanción de la ley de paridad y el avance de otros proyectos impulsados por los colectivos feministas.
Sobre las materias pendientes para 2021, Mahmud enumeró, entre otras, la reforma del Código Procesal Civil y Comercial, la ley de educación provincial, la educación sexual integral, la ley de salud y la ley de clubes.
—¿Qué balance hacés del año legislativo?
—Hago un balance positivo. Creo que la renovación generacional y casi con paridad de la Cámara de Diputados y Diputadas se notó en muchos aspectos del año legislativo. No solo en la agenda de género que estuvo presente todo el año, sino también en la extensa producción de iniciativas legislativas, en el constante funcionamiento de las comisiones y sesiones, en todas las medias sanciones que pudimos lograr este 2020, muchas de ellas para acompañar a los sectores más afectados por la crisis que provocó la pandemia. La Cámara de Diputados y Diputadas fue, sin dudas, la que marcó la agenda de la política santafesina en muchos momentos del año y también la que tuvo voluntad, con todos sus legisladores y legisladoras, de involucrarse en conflictos que fueron muy significativos para Santa Fe, como la Causa Vicentin o la causa del juego clandestino.
—¿Cuál fue la ley más importante aprobada este año?
—Para mí sin dudas fue la ley de paridad. Una deuda pendiente de años que era indispensable para mejorar nuestra democracia, nuestras instituciones y para que las mujeres, que somos la mitad de la población, pero estamos subrepresentadas, tengamos el lugar que nos corresponde en las listas, en los órganos de gobierno y en todos los ámbitos dónde se tomen decisiones sobre asuntos que nos afectan a todos.
—¿Cuáles son las materias pendientes y los desafíos para 2021?
—Tenemos varios desafíos para el 2021. Considero que algunos de ellos son la reforma del Código Procesal Civil y Comercial para garantizarle una mejor justicia a la gente, la ley de educación provincial, la ESI (educación sexual integral), la ley de salud y la ley de clubes entre tantas otras.
—Este año se vio a muchas diputadas trabajando en conjunto para llevar al recinto y aprobar leyes que tienen que ver con la agenda de los feminismos. ¿Cómo se dio esa articulación, más allá de las diferencias partidarias?
—Fue una experiencia muy linda. Estoy convencida de que muchas de nosotras llegamos a la Legislatura habiendo aprendido mucho del movimiento de mujeres, de Ni Una Menos y de la campaña por el aborto legal y que todos esos aprendizajes se notaron en la dinámica de coordinación, en el espíritu de trabajo conjunto y de lucha colectiva por más derechos. Trabajamos juntas todo el año, más allá de las diferencias partidarias, aportando en muchos temas lo que cada una podía para que los proyectos se aprobaran en el recinto.
—¿Qué evaluación hacés del primer año de Perotti?
—Mi evaluación de este primer año de Perotti es negativa. Veo un retroceso muy grande en políticas sociales, en políticas de juventudes que ya no existen. En materia educativa no existió ni existe aún un plan para atravesar este momento, sobre cómo retornar progresivamente a la presencialidad, cómo acompañar a los y las docentes que se han esforzado muchísimo todo el año, cómo evitar la deserción estudiantil o salir a buscar a los que abandonan la escuela. En materia de seguridad, el contrato electoral de paz y orden con el que ganó las elecciones está lejos de cumplirse o de avanzar siquiera, ya que vemos que todos los índices de delito han aumentado sistemáticamente y que no aparece una gestión diaria y cotidiana, del día a día, para afrontar el problema.
—¿Qué opinás de la dinámica política oficialismo-oposición durante 2020?
—Que costó. El gobierno actual casi no tuvo agenda legislativa, tampoco interlocutores que dialoguen y busquen consensos en diputados y senadores, tampoco un diálogo interno fluido con los propios legisladores del PJ. La discusión de la ley de necesidad pública, a comienzos de año, se dio en el marco de aprietes y agresiones constantes al Frente Progresista, a las autoridades de municipios y comunas, de divulgación de un estado de situación económica de la provincia que en ese entonces decíamos que no era tal y que durante el año terminó comprobándose ya que en Santa Fe al Estado no le faltó plata. Al contrario, vemos un gobierno que ahorra millones en plazos fijos en el peor momento de crisis para los santafesinos y santafesinas. Creo que esto debe cambiar urgente para garantizar institucionalidad en la provincia. Los canales de diálogo deben existir entre los poderes del Estado, el Ejecutivo debe dialogar con la Legislatura sobre las leyes que le interesan y aportar a construir acuerdos, no pretender que sea una mera escribanía.
—¿Cuál será la estrategia electoral del socialismo para 2021?
—Este fue un año muy difícil para la Argentina y para la provincia de Santa Fe y en eso estuvimos enfocados desde el socialismo. Sabemos que tenemos, como socialistas y con el Frente Progresista, un apoyo muy importante de muchos sectores de la sociedad, que tenemos electores que podrían ser candidatos y que esta provincia necesita referencias nacionales en el Congreso que puedan defender los intereses de todos; seguramente los primeros meses de 2021 nos encuentren en esa discusión con el resto de los partidos que integran el Frente. Desde el Partido Socialista creemos que es urgente salir de la grieta que consume diariamente al país en discusiones que no llegan a buen puerto ni solucionan los problemas de la gente y trabajaremos para cambiar esa realidad con nuestras propuestas políticas el año próximo.