Roberto Rivero, el Pipy, el ferroviario que cambió de vía y eligió pararse frente a las cámaras y sentarse atrás del micrófono, volvió a romper los sábados de la televisión santafesina con “Musicalísimo”.
La televisión local sí que se puede ver los sábados a la noche porque se reestrenó el que muy probablemente fue su programa más exitoso y que levanta una pantalla que venía algo intrascendente: el Musicalísimo del Pipy Rivero, quien se armó un equipo joven para retornar a todo ritmo y en todas las pantallas, las tradicionales y las de dispositivos que fueron apareciendo desde que se puso en stand by a principios de los 2000. La gran vuelta fue el 9 de enero de 2021 a las 20 por Telefe Santa Fe. Desde entonces, también sale por 5rtv una hora más tarde el mismo día y se sube a YouTube también a las 21, pero los domingos.
Ya desde las promos, con Pipy bailando en las escaleras del anfiteatro del Parque Sur parodiando al Joker de Joaquin Phoenix, siguiendo sus redes y atendiendo lo que él mismo podía contar, se veía que este show iba a volver a hacer una diferencia. Recuperando lo mejor de otras épocas tan bien como lo que se actualizó: lógicamente sin público, una pérdida más que sensible; se incorporaron a la conducción no una sino varias conductoras (la esperancina Anahí Mergen y la santafesina Florencia Ruiz); mucho contenido se dedica exclusivamente para Instagram, Facebook y su canal de YouTube (“estamos bandeados de material, hay mucho que no nos entra en el programa”) también se incorporaron secciones de humor y momentos solidarios: “Logramos el apoyo de algunas empresas dispuestas a ayudar con donaciones y, ante el panorama actual, nos decidimos casi sin pensarlo”, cuenta el conductor en una charla con Pausa unos días antes de la premiere.
Cada vez que cuenta alguna novedad en la que está trabajando con su staff, Pipy deja notar que sus ganas de aprender de él y de mantenerse al día, sea con una buena estética cinematográfica para las promos, teniendo en mente la estrategia de redes sociales o convocando personalmente a artistas, auspiciantes y todos los contactos necesarios para llevar adelante la empresa: “Muchos aspectos hay que asumirlos personalmente, desde el trato con los grupos hasta la supervisión de muchas cosas. Yo hago el esfuerzo de hacerlo hasta donde me da el físico, por ahí no alcanzo”.
La demanda del día a día es dura, cuenta que la edad no viene sola, que ya no tiene tiempo para andar en la bicicleta, que hay días en los que agarra el auto y maneja hasta Rafaela (de allá es la productora a cargo del programa, Aires Show) para presenciar el proceso de edición y montaje: “Son cosas que no se pueden hacer por Zoom”, confirma Pipy, antes del último trago de un cortado.
Así como intenta no quedar atrás en nada, Pipy cuenta que está buscando con especial énfasis en dar con artistas no masculinos. Rápidamente enumera a algunas cantantes salientes, todas hijas de referentes como Lumila Grenón (de ascendencia palmera), Wendy Zanco (hija de Darío) y Azul Castelló: “No es que no las haya, pero no estamos pudiendo encontrar tantas cantantes como nos gustaría”, avisa.
En los primeros programas se vio a un Pipy feliz de volver a protagonizar el hit de su vida, todavía con buen timing y con la energía muy arriba. Mantiene la forma, el estilo y, sobre todo, la habilidad de los presentadores clásicos como Pipo Mancera pero con una voz con más presencia como la de Badía, aunque los locutores que hicieron mella más de cerca en la formación de Pipy Rivero como conductor se la dieron personalidades más cercanas: “Cacho Galé fue mi gran maestro y otra eminencia para mí fue Javier Fernández Ortiz, un tipo que podía hablarle de igual a igual a cualquiera, porque era un bocho”.
Esta temporada ya tiene confirmados casi 100 capítulos repartidos “en los 19 departamentos de la provincia” y obviamente presentando a referencias de la cumbia como Coty y Sergio Torres ya en su primera emisión. Durante la entrevista también repasaron imágenes de sus visitas allá por los ‘90 como vocalistas de Alegría y Cali. Este recurso nació de alguna manera con el boom de los videos de aquellos años en las redes de Pipy y se trasladó al programa como “Musicalísimo Retro”, una sección propia que consiste en recordar los pasos de los artistas en los viejos días del ciclo. Grupo Teorema, El Nene Godoy (Los del Málaga) y Mario Álvarez (Grupo Trinidad), ya pasaron por el sillón del nuevo set para hablar de aquellas épocas y también con motivo del “De padres a hijos”: “Las respuestas de los artistas fueron y son magníficas, fueron reencuentros con mucha alegría”.
Fotos: cortesía Rodrigo Rivero.