En el país del norte se registran más de 418 mil personas fallecidas por la pandemia, una cifra que, según su nuevo presidente, Joe Biden, ameritan un “esfuerzo de guerra”.
En plena curva nacional ascendente, Estados Unidos superó este domingo los 25 millones de casos confirmados de coronavirus, mientras que los muertos son más de 418 mil, según la Universidad Johns Hopkins, cifras que, según el flamante presidente, Joe Biden, ameritan un “esfuerzo de guerra”.
Apenas asumió, Biden dejó en claro que la gestión de la pandemia es su prioridad número uno y ya anunció más fondos y coordinación con los estados para acelerar la campaña de vacunación y el testeo, al tiempo que decretó medidas de prevención federales, como el uso de tapabocas para todos los viajes y el cumplimiento de una cuarentena para todos los que ingresen al país.
Hasta el momento, más de 41,4 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus fueron distribuidas en el país, pero menos de la mitad -más de 20,5 millones- fueron administradas, según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el ente público encargado de ejecutar y monitorear la gestión de la pandemia, según la cadena de noticias CNN.
Pese a la campaña masiva de vacunación, Estados Unidos sigue siendo por lejos el país con peores cifras absolutas de la pandemia con más de 25 millones de casos confirmados y más de 418 mil muertos, según el conteo de la Universidad Johns Hopkins.
En las últimas horas, el modelo predictivo de la Universidad de Washington, muchas veces citado por funcionarios y analistas como dato para analizar el horizonte sanitario del país, estimó que alrededor de 569 mil personas habrán muerto por el virus para el 1º de mayo.
Pese a que esta cifra representa un leve aumento con respecto a la última predicción para esa misma fecha, la universidad destacó que para mayo la campaña de vacunación habrá salvado a casi 43 mil estadounidenses, si se mantienen las metas, 157 millones ya fueron inmunizados y la efectividad es de al menos un 50%.
En medio de este escenario sombrío, la doctora Deborah Birx, coordinadora del equipo de respuesta a la pandemia durante el pasado año, acusó al expresidente Donald Trump de difundir información que no había sido elaborada por su equipo de científicos y hasta aseguró que “había gente en la Casa Blanca que creía que el coronavirus era una farsa”.
“Vi que el presidente presentaba gráficos que nunca hice. Así que sé que alguien... estaba creando un conjunto de datos y gráficos paralelos. No sé quién fue”, contó la exfuncionaria en una entrevista anoche con el canal de noticias CBS.
Paralelamente, las autoridades del condado de Clark -que comprende a la ciudad de Las Vegas-, en el estado Nevada, anunciaron la próxima reapertura de las escuelas debido a que en los nueve meses en que permanecieron cerradas se suicidaron 18 estudiantes, el doble de todo el año anterior, según la agencia de noticias ANSA.