Argentina vacunó a más del 3% de su población en apenas seis días. La semana que pasó, todavía sin los datos de su séptimo día, fue la de mayor cantidad de vacunados y mayor distribución de vacunas. La más beneficiada: la Ciudad de Buenos Aires, por lejos.
Pese a las acusaciones de discrecionalidad y favoritismos que elevó a la ONU la líder de la ultraderecha, Patricia Bullrich, la campaña de vacunación argentina acelera como nunca antes, favoreciendo sobre todo a la Ciudad de Buenos Aires –comandada por el PRO– en desmedro del resto del país. Más allá de lo que diga ese reporte fundamentado en recortes periodísticos y tuits de trolls, el distrito más rico del país es el que más dosis recibió y, por ende, el que más cobertura le dio a su población. Más del 31% de los porteños ya recibieron su primera dosis, y todavía quedan poco menos de 150 mil dosis disponibles, más las que todavía faltan llegar la semana que viene. Tienen hoy una cantidad de dosis recibidas para vacunar al equivalente de casi el 46% de su población. La oficialista provincia de Buenos Aires recibió dosis para vacunar al 37,8% de los bonaerenses. La diferencia es enorme. El esfuerzo también. Horacio Rodríguez Larreta aplicó 1.270.016 dosis totales en un distrito cuyas dificultades logísticas son la de una ciudad. Axel Kicillof aplicó 5.135.886 dosis en una de las provincias más grandes del país. Y además, negoció la llegada de 10 millones de dosis de vacunas de Bharat Biotech de la India.
El caso de Santa Fe estuvo en el tapete durante la última semana: recibe menos vacunas que distritos de tamaño equivalente. Tiene una cantidad de dosis disponibles como para inocular al 37,3% de la población y está entre las cinco provincias que menos vacunas recibieron, en términos relativos. Córdoba recibió relativamente un poco más, 37,6%. La CABA, ya se vio, es la más beneficiada.
Poniendo cuarta
La última semana tuvo el ritmo de vacunación más alto desde el inicio de la campaña. La llegada de las vacunas de AstraZeneca y la regularización de los envíos de Sputnik V tuvieron como resultado la aceleración en las inoculaciones. Entre el sábado 29 de mayo y hoy se distribuyeron 2.956.700 dosis, la mayor cantidad registrada. El resultado: sólo con los datos de la vacunación de los últimos seis días (hay muy baja carga del viernes) se alcanzaron unas 1.377.763 inoculaciones, que llegaron al 3,12% de la población. El ritmo promedio de inoculaciones saltó de 118 mil por día a 196 mil por día, muy cerca de la cifra ideal de las 250 mil inoculaciones diarias promedio.
Desde el inicio de la campaña ya se vacunó con una dosis a 10.733.428 personas, más del 23% de la población. CABA, La Pampa y San Luis siguen marcando la delantera, Misiones otra vez es la que menos inocula y menos utiliza las dosis que tiene disponibles.
Según los datos de NOMIVAC, en la última semana el ritmo de vacunación se mantuvo y se aplicaron más de 196 mil vacunas al día, tanto de primera como de segunda dosis.
Argentina ya aplicó 13.730.521 vacunas. Esa cifra alcanza para vacunar totalmente varias decenas de países del mundo. Los distritos con mayor porcentaje de población inmunizada son también los que menos stocks de vacunas tienen: aplican todo lo que reciben. Esa tendencia se mantiene en las últimas semanas tanto en el distrito con menores problemas de logística para la vacunación, la Ciudad de Buenos Aires, como en San Luis y La Pampa.