La Justicia decretó la quiebra de la empresa Correo Argentino SA. Una estafa que duró 20 años.
La jueza Marta Cirulli decretó el lunes pasado la quiebra del Correo Argentino SA, una empresa del Grupo Macri, tras dar por fracasado el proceso de salvataje. La jueza tomó la medida luego de que fuera rechazada una nueva propuesta de la empresa que no satisfizo el interés del Estado Nacional, acreedor Categoría A, según surge del fallo de 44 páginas.
Cirulli recordó que de las seis firmas que se presentaron al salvataje solo el propio Correo Argentino SA “mantuvo el interés de seguir con el trámite” y párrafos más adelante explicó que la oferta realizada no satisfizo a los acreedores.
La jueza señaló en su fallo que la oferta realizada por la concursada solo representaba el 100% de la deuda a los ojos de la propia empresa, pero que no abarcaba el valor actual de la misma.
La ley 24.522 de Concursos y Quiebras establece en su artículo 48 inciso 8 que “cuando en esta etapa no se obtuviera acuerdo preventivo, por tercero o por el deudor, o el acuerdo no fuese judicialmente homologado, el juez declarará la quiebra sin más trámite”.
El concurso de acreedores del Correo Argentino se inició en 2001, cuando la empresa del Grupo Macri ya había dejado de pagar hace años el millonario canon que le correspondía para poder explotar la concesión del correo oficial.
Durante el gobierno de Mauricio Macri, el Estado aceptó una oferta del Grupo Macri para pagar la deuda en 15 cuotas; un acuerdo que no prosperó porque la fiscal de la Cámara Comercial Gabriela Boquín determinó que era ruinoso para las arcas del Estado.