En el Senado está todo listo para que regresen las sesiones presenciales. En la Cámara de Diputados, Juntos por el Cambio, que antes había cuestionado las sesiones virtuales, ahora se opone con el argumento de que el Protocolo de Recinto Protegido se dictó “excediendo las facultades que tiene la Presidencia de la Cámara”.
La Cámara de Diputados de la Nación buscará retomar la presencialidad del cuerpo y realizaría en las próximas semanas la primera sesión bajo esa modalidad después de la última concretada el 27 de febrero de 2020, tras la eliminación del sistema mixto con el que funcionó el último año y medio por las restricciones dispuestas a raíz del coronavirus.
Una vez formalizada la decisión adoptada el jueves pasado por el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, para retomar la presencialidad, la Cámara baja volverá a las deliberaciones en el recinto de forma presencial, como sucedía antes de la declaración de la emergencia sanitaria por la pandemia.
En tanto, se mantendrá la posibilidad de que las comisiones continúen trabajando en forma remota para facilitar la tarea de los legisladores del interior cuando no puedan viajar a Buenos Aires.
Fuentes parlamentarias revelaron a Télam que la semana próxima continuarán las reuniones de Massa con los jefes de los diferentes bloques para fijar una fecha de posible sesión y consensuar allí una agenda de temas a tratar, que incluirá proyectos con dictamen para debatir en el recinto, en un plenario que se realizaría antes de las elecciones del 14 de noviembre.
Massa le comunicó el miércoles pasado a las autoridades del bloque de Juntos por el Cambio, que encabeza Mario Negri, su decisión de firmar la resolución para volver a las sesiones presenciales en lugar de las mixtas, como se viene haciendo desde hace un año y medio, pero con los protocolos extremados para evitar posibles contagios.
La medida firmada por Massa eliminó de esta manera las sesiones mixtas que se realizaron en 2020 y hasta julio de este año y que generaron fuertes cruces entre oficialismo y oposición a la hora de renovar el protocolo que, si bien se ratificó sucesivamente, fue motivo de polémica entre el Frente de Todos y Juntos por el Cambio.
La resolución establece que habrá un Protocolo de Funcionamiento Parlamentario con Recinto Protegido por el cual podrán participar todos los miembros que componen el cuerpo.
Si bien Juntos por el Cambio venía reclamando presencialidad, las autoridades del interbloque que encabeza Negri cuestionaron en las últimas horas la medida y pidieron que Massa derogue esa decisión, al sostener que se establece un Protocolo de Recinto Protegido unilateralmente “excediendo las facultades que tiene la Presidencia de la HCDN”.
Para JXC, la resolución “implica un cambio al Reglamento y esto exige no sólo la participación de los bloques en su redacción si no que tres cuartas partes de los presentes en una sesión voten afirmativamente”, a la vez que advierte que no están de acuerdo en el trabajo remoto de las comisiones.
Según la resolución adoptada por Massa, para participar de las sesiones, los diputados y diputadas deberán respetar las medidas sanitarias y tener un resultado negativo de Covid-19 de PCR de hasta 72 horas previas al inicio de la sesión o de 48 horas en el caso del test rápido antigénico.
Sólo están exceptuados de asistir a las deliberaciones del cuerpo aquellos legisladores con inmunodeficiencias, VIH, con medicación inmunosupresora o corticoides en altas dosis, pacientes oncológicos y trasplantados y personas embarazadas.
En cuanto a las comisiones, la resolución señala que “se permitirá la presencialidad, respetando las medidas de prevención establecidas por las autoridades sanitarias para las reuniones de comisión que se desarrollen en el ámbito de la HCDN, utilizándose espacios de dimensiones que permitan el distanciamiento establecido en los protocolos vigentes”.
Días atrás, en declaraciones radiales, Massa afirmó que “vuelve la presencialidad en materia de sesiones y, en materia de comisión vamos a tener la posibilidad de que las autoridades puedan trabajar de manera virtual para que el trabajo de comisiones no dependa de los vuelos y la conectividad, y que la conectividad sea la que impone la virtualidad”.
“Es razonable ir hacia un esquema de protocolo, cuidado y presencialidad. Lo venimos pidiendo hace mucho. La sociedad está trabajando así y tenemos que marchar a eso. Da la impresión que para el Gobierno hace una semana se terminó la pandemia, pero nosotros decimos hace tiempo que se tiene que trabajar con protocolo y que así debe hacerse: el Gobierno recién ahora está de acuerdo”, afirmó el diputado radical Ricardo Buryaile (Juntos por el Cambio-Formosa) en declaraciones a Télam.
Sin embargo, para el diputado de la Izquierda Socialista Juan Carlos Giordano, la medida adoptada por Massa permite “que el Gobierno simule una normalidad del país que no hay, como por ejemplo el no uso de los barbijos en lugares públicos, que es una barbaridad. El problema en la cámara no es si las sesiones serán presenciales o virtuales sino qué se vota y esta cámara viene votando leyes para salvar a los grandes patronales y grandes capitalistas”.
El protocolo de funcionamiento de Diputados venció el pasado 23 de julio y no se volvió a prorrogar, con lo cual la última sesión se efectuó el 8 de julio y desde esa fecha la actividad parlamentaria está virtualmente paralizada debido a la campaña electoral.
Pero, con la resolución firmada por Massa para el retorno a la presencialidad, el oficialismo aspira a retomar las conversaciones para acordar un temario de proyectos “sin conflictividad” que permita sesionar en las próximas semanas.
El temario que el oficialismo buscará acordar con los bloques opositores para la próxima sesión incluiría la ley ovina, la autorización para la salida e ingreso de tropas para los ejercicios conjuntos con otros países y el proyecto de etiquetado frontal, entre otras cuestiones.
De todos modos, se espera que en las próximas semanas arranque el debate en comisión del proyecto de Presupuesto 2022, tras la presentación formal del texto por parte del Gobierno.
Vuelve el Senado
A diferencia de lo que pasa en Diputados, en el Senado sí hay consenso para la presencialidad. Los líderes del oficialismo y de la oposición avanzarán esta semana en las conversaciones para retomar las sesiones presenciales suspendidas por la pandemia de coronavirus, con un esquema en el que buscarán mantener el sistema mixto de virtualidad y presencialidad en el trabajo de las comisiones, de la misma manera que ocurrirá en la Cámara de Diputados.
El jefe del bloque del Frente de Todos, José Mayans, convocó para esta semana a una reunión en su despacho del Palacio Legislativo a su par de Juntos por el Cambio, Luis Naidenoff, y al jefe del bloque de PRO, Humberto Schiavoni, para resolver el método de regreso a las sesiones con todos los senadores sentados en sus bancas.
Actualmente, rige en la Cámara de Senadores un decreto firmado el 31 de agosto por la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que establece una nueva prórroga del sistema remoto por 60 días y que aún debe ser refrendado por el pleno de la Cámara.
Mayans declaró que “hay acuerdo” para realizar una sesión presencial en el corto plazo y adelantó que se analiza “continuar con el funcionamiento mixto” en el trabajo de las comisiones “hasta que se puedan ajustar todos los detalles”.
Desde la oposición, Schiavoni dijo a Télam que “están dadas las condiciones para volver a la presencialidad plena” y aseveró que JxC no está de acuerdo “con seguir haciendo sesiones remotas” ya que “si la gente ya vuelve a las canchas y los trabajadores a sus lugares de trabajo”, los senadores no pueden “ser unos privilegiados y seguir sesionando de manera remota”.
En una nota enviada a mediados de agosto a la presidencia del Senado, el interbloque de JxC planteó la necesidad de retomar las sesiones presenciales de manera completa.
Actualmente, de acuerdo a las últimas resoluciones aprobadas por el cuerpo, rige un cupo de 20 senadores que deben ir alternándose para seguir el desarrollo de las sesiones desde el recinto de la Cámara alta.
El resto de los legisladores participan de los debates desde sus despachos o desde sus provincias mediante el sistema de videoconferencias, que funciona desde el año pasado, en el marco de las medidas restrictivas tomadas por la pandemia de coronavirus.
Los legisladores de la oposición señalaron que “en el actual contexto en el que se ha retornado a la presencialidad escolar en todo el país, se habilitan espectáculos deportivos con público, están funcionado los vuelos a las distintas provincias y los demás poderes del Estado han regresado a la presencialidad, no hay motivos para “prorrogar el funcionamiento remoto”.
En el decreto 9/21 firmado por Fernández de Kirchner se estableció una nueva prórroga del sistema remoto por sesenta días.
La última extensión del período de reuniones parlamentarias por videoconferencia se inició el 24 de junio y también fue por dos meses.
En los fundamentos del decreto, la vicepresidenta mencionó que la prórroga se repitió porque “los diferentes bloques que componen esta Honorable Cámara elevaron sus propuestas e inquietudes respecto de la continuidad de las sesiones” remotas.
Además, remarca que el sistema implementado “ha resultado exitoso a los fines de garantizar el funcionamiento (del Senado) en la presente emergencia”.
Con información de Télam