El espacio, que lleva el nombre de la histórica Madre de Plaza de Mayo de Santa Fe, cuenta con tres aulas que también fueron nombradas en homenaje a otras mujeres históricas de la zona.
Desde este domingo 31 de octubre el barrio costero de La Vuelta del Paraguayo cuenta oficialmente con el Centro de Educación Popular “Celina Queca Kofman” gestionado por la organización Proyecto Revuelta. Allí se desarrollan diversos talleres artísticos, culturales y productivos abiertos a la comunidad, además de dos cursos de la EEMPA N° 3.190 “Bachillerato Popular - La Vuelta del Paraguayo”.
En un acto emotivo, se recordó a la Madre de Plaza de Mayo de Santa Fe como “una persona que nos representa, porque luchó toda su vida por la memoria, la verdad y la justicia”. Además, Celina Kofman apoyó desde los inicios el proyecto educativo del Bachillerato Popular. Por ello, concluyen, “en nuestras prácticas educativas y en su nombre, queremos mostrar a nuestra ciudad que la Queca y sus luchas palpitan en La Vuelta del Paraguayo. Ahora y siempre”.
También este acto fue la ocasión de nombrar las tres aulas que integran el espacio, llevando desde ayer en sus paredes los nombres de mujeres importantes para la historia del barrio costero y de la organización. Rita Alarcón comprometió su vida a luchar por mejorar las condiciones de vida en el barrio; fue presidenta de la Vecinal, cuando era raro que mujeres ocupen estos lugares, y desde ahí exigió por obras para una vida digna, apostando al trabajo comunitario. Yolanda Espíndola y Stella Maris Alarcón fueron las primeras personas en participar del método cubano de alfabetización “Yo sí puedo” desarrollado por Proyecto Revuelta en 2013, iniciando el camino que llevó a que hoy en día La Vuelta del Paraguayo cuente con su propia escuela secundaria para adultos.
Este Centro funciona en un espacio cedido por la Agrupación Vuelta del Paraguayo, junto a la Escuela Primaria “Mateo Booz”, sobre el riacho Santa Fe. Hace varios años, allí funcionaba un destacamento policial, por lo que desde la organización plantearon que “logramos transformar un lugar de represión en un punto de encuentro para la vida, para la educación, para el arte y para la producción”.