Habrá cierre de clases y actividad no esencial. Por el avance de Ómicron, que llegó hace apenas tres semanas, es uno de los países que actualmente tiene mayor cantidad de casos por millón de habitantes.
Este domingo 19 los Países Bajos volverán a las restricciones a la actividad y la circulación. El anuncio fue hecho este sábado 18 por el primer ministro, Mark Rutte. El avance de la variante Ómicron provocó la vuelta a un confinamiento estricto, que se mantendrá hasta el 14 de enero, con el cierre de toda la actividad no esencial (comercios, restaurantes, peluquerías, gimnasios, cines y teatros). Tampoco se dictarán clases en colegios y universidades, hasta el 9 de enero. Se recomienda también no recibir más de dos personas ajenas al núcleo familiar, cifra que se puede estirar a cuatro para las celebraciones de fin de año.
"Estoy aquí esta noche con un estado de ánimo sombrío. Para resumirlo en una frase, Holanda volverá al confinamiento a partir de mañana", dijo Rutte. Solo permanecerán abiertas las tiendas imprescindibles, como supermercados, farmacias, estaciones de servicio y los servicios mínimos. El primer ministro advirtió que el incumplimiento de las restricciones podría desencadenar en una "situación inmanejable en los hospitales".
Países Bajos ronda actualmente los 900 casos por millón de habitantes diarios. Esta cifra en Argentina está cerca de 130, como para tomar dimensión. Respecto del cierre, Rutte justificó: "Es inevitable por la quinta ola y por la diseminación de Ómicron, que es más rápida de lo que temíamos". Se espera que la nueva variante se vuelva predominante, sobre la Delta, antes de finde año.
Ómicron llegó a Países Bajos apenas hace tres semanas. El país se encontraba ya bajo el cierre de la actividad nocturna, para bajar los niveles de casos que se hallaban por arriba de los 1300 por millón de habitantes.