Tras más de dos años de sequía, los vecinos de Villa Adelina Este, Santo Tomé, se están quedando sin agua porque las napas se están agotando. Hay un decreto que ordena la extensión de la red de agua potable, pero la obra no arranca.
En los grupos de Whatsapp de vecinos de Villa Adelina Este se habla de una sola cosa: no hay agua. La suma de la sequía histórica y el aumento de población en el barrio, que se llenó de casas con los primeros créditos Procrear, parece haber superado la capacidad de las napas. Las soluciones de urgencia se suceden, los plomeros perforadores extienden los caños para que se hundan más en la tierra o, directamente, hacen pozos y bajan las bombas extractoras, que en algunas casas apenas si sacan un chorrito de agua cuando se hace de noche, cuando no se queman girando en falso. Varios de los residentes ya hicieron los arreglos el año pasado, los problemas vienen desde hace rato.
Situado a la vera del río Coronda, atrás de los cuarteles, Villa Adelina Este es un barrio conocido por su vista a un gigantesco albardón costero, su inusual cantidad de ombúes, el Náutico Santo Tomé, el yacimiento arqueológico y el museo donde se conservan restos de civilizaciones que hace tres mil de años poblaban la zona.
Los vecinos dependen del agua subterránea de napa para vivir. En el marco del Plan Incluir, el 16 de junio de 2021 se firmó el decreto provincial para extender la red de agua potable a ese barrio del sur de Santo Tomé, también a Los Hornos y a Villa Adelina Oeste. La obra fue celebrada por las autoridades, el senador del departamento La Capital, Marcos Castelló, habló de “una vieja deuda política que se tenía con los vecinos de Santo Tomé”.
La obra todavía no se adjudicó. A través de audios de Whatsapp los vecinos expresan su desesperación. “Le dije que por favor me traiga al aguatero. Todavía no aparecen por mi casa. No tengo ni una gota de agua”; “Buenos días vecinos. Quisiera saber a quiénes le están llevando agua, los de regador. Dijeron que pasó el miércoles por la tarde, dejando un tanquecito de agua. No hay agua ni para bañar las criaturas. Le han llevado el agua a quien se les da la gana. No tendría que ser así eso”; “Ellos se comprometieron en traer la cisterna domicilio por domicilio, para que tengamos agua de consumo para lavar. No es potable, por ahora”; “Va a llegar algún momento que las napas van a estar muy lejos y no vamos a tener agua en las perforaciones”.
Organizados por el agua
Los vecinos se organizaron y reclamaron en la Municipalidad. En diálogo con Pausa, uno de los residentes del barrio, Esteban Montenovi, comentó que “Nos juntamos con funcionarios y funcionarias de Santo Tomé, tratamos de llegar un acuerdo para que asistan y provean agua para los quehaceres domésticos. Diariamente, pasa un camión con agua que va llenando unos tachos que provee la Municipalidad. Llenar los tanques de agua trae muchas complicaciones, no es una tarea sencilla”.
Un referente del barrio, Rodrigo Colombo, expresó en diálogo con LT10 que “Las napas no tienen agua, las bombas no absorben, no chupan nada de agua. Adelina Este no tiene la conexión completa de agua, la tiene solamente un sector. Ese es el reclamo actual que hace el barrio. El proyecto estaba en marcha, pero faltaba la firma del señor Marcos Corach, el ministro de Planificación de la provincia. Él tendría que dar el puntapié. Falta su firma. La obra, cuando se ejecute, va a demorar. Los vecinos temen que venga más sequía y directamente las bombas no absorban nada”.
Obra demorada
La extensión de la red de agua potable tiene el financiamiento otorgado a través del decreto 898/21. Allí se detalla que se destinarán $32.175.001,99 para la ampliación del servicio de agua corriente en barrios Adelina Este, Adelina Oeste y Los Hornos, en el marco del Plan Incluir. La primera licitación para esa obra se hizo el 28 de julio de 2021 y quedó desierta. Hubo una nueva licitación, con equivalente resultado. Ahora, la Municipalidad puede realizar una contratación directa. Sin embargo, el dinero imputado en el decreto todavía no fue depositado, porque no se firmó aún un convenio que le dé marco entre la ciudad y la provincia.
La directora de Gestión y Desarrollo de Proyectos y Obras de Santo Tomé, Mariana Albornoz, explicó que “El decreto autoriza que se imputen los fondos para que se realicen estas obras de agua. Se hicieron los pasos administrativos y los llamados a licitación, que quedaron desiertos. Nosotros estaríamos en condiciones de realizar una contratación directa, siempre y cuando los fondos estén disponibles, lleguen al municipio. Lo primero que hay que hacer es firmar un convenio, porque está dentro del Plan Incluir. Es algo que no depende del municipio, es una decisión del gobierno provincial. De todos modos se han hecho gestiones para lograr concretar la firma”.
Sólo para Adelina Este hay que instalar 3770 metros lineales de cañería de PVC para el abastecimiento y ejecutar 367 nuevas conexiones domiciliarias. El presupuesto sin actualización para ese barrio es de $12.979.678,49. Pero ni siquiera está adjudicada la obra. Y una vez adjudicada, el plazo formal para su construcción es de seis meses. Una eternidad para las napas agotadas y la falta de agua para la vida diaria.