Jatón pone todas las fichas en los barrios y el transporte

Con la obra del Camino Viejo a Esperanza como insignia, el intendente repasó su gestión. El grueso del texto se dedicó a los trabajos realizados en el norte y el oeste. Se destacaron cinco temas: basura, seguridad, cultura y turismo, nocturnidad y la movilidad, el mayor desafío. Chau tren urbano.

El intendente Emilio Jatón busca consolidar su perfil de funcionario que trabaja en los barrios. Por convicción o por construcción de poder no se corre de esa línea. Viene de 12 años de gestión del radicalismo universitario, que terminó reducido al apoyo electoral de las cuatro seccionales céntricas más ricas de la ciudad. Y la ciudad viene de décadas de desigualdades crecientes entre los vecinos de San Agustín y los de Candioti, por nombrar dos puntos asimétricos tanto en los ingresos como en la inversión pública acumulada con el paso de los años.

En el oeste y en el norte de Santa Fe hay enorme cantidad de hectáreas, barrios enteros, donde el Estado es apenas la policía cuando pasa de a ratos, más para verduguear que para otra cosa, un centro de salud a unas cinco cuadras, una escuela un poco más lejos y el bondi allá en la avenida. Ahí dice Jatón que quiere dejar su huella. Quedan dos años más para saber si en esta gestión lo logró.

Las obras enumeradas

El mensaje leído ante el pleno del Concejo Municipal –donde los ediles de Juntos por el Cambio exhibieron bandera de Ucrania y los del justicialismo de Malvinas– comenzó con una exhaustiva enumeración de obras realizadas en los barrios más carenciados. De hecho, fuera de las zonas más pobres de la ciudad, apenas si se nombre a 7 Jefes y Guadalupe, más allá de ciertos enclaves públicos.

Jatón inició con su obra insignia: el Camino Viejo a Esperanza, o Menchaca. "Poner la mirada en el noroeste de la ciudad es una acto de justicia social con quienes han sido históricamente postergados. No hacemos sólo obras, hacemos transformaciones sociales. Eso es Camino Viejo. Hoy, esta obra tiene un 90% de avance", dijo el intendente a poco de comenzar su alocución. Luego, largó la batería:

• Obras viales sobre calle Berutti y conversión en doble mano hacia el oeste

• Puesta en valor de la Estación Mitre e inicio de la segunda etapa.

• Planta potabilizadora de agua de Colastiné Sur

• Finalización y conexión del desagüe Espora

• Yapeyú: pavimento, cordón cuneta, cloacas, desagües pluviales y alumbrado público. Recomposición integral de 12 de Octubre con luces, veredas y señalizaciones. Puesta en valor el corazón del barrio.

• Las Ranitas y Loyola Norte, llegada del acueducto Santa Marta, obras de saneamiento.

• San Agustín, pavimento y cordón cuneta para que pueda ingresar el colectivo.

• Obras básicas en Rosso y Estrada con financiamiento del BID.

• Obras viales, red cloacal, provisión de agua potable, alumbrado, veredas, señalización y forestación en Los Hornos

• Red cloacal en Pompeya, Nueva Pompeya y 29 de Abril

• Entubado en Cabal, Estanislao López, Santa Marta y Altos de Noguera

• Revestimiento del Canal El Lele en Colastiné Norte.

• 400 nuevos títulos de propiedad en los barrios San Agustín, Loyola, Ceferino Namuncurá, San Lorenzo, Santa Rosa de Lima, 12 de Octubre, Mosconi, Estrada, Ciudadela, Santa Rita, Estanislao López, Nueva Esperanza, Sarmiento, Arenales, Piquete, Las Flores, Santa Marta y Norte Unido. También se mensuraron 680 lotes en Marcos Bobbio, Barranquitas, 29 de Abril y Loyola sur

• Recambio del 40% de las luminarias de la ciudad con luces led en las avenidas y calles más transitadas.

El listado no sólo muestra el foco de interés sino que exhibe las carencias. Yapeyú es un barrio nacido en la década del 50, con santafesinos desalojados desde el extremo sur de la ciudad –la Boca del Tigre– y depositados en el extremo norte. 70 años pasaron y todavía es noticia el cordón cuneta.

Un detalle, hasta en los cursos inglés se busca dar la impronta barrial: "descentralizamos los cursos de inglés de nuestra escuela de idiomas, que ahora tienen presencia en los barrios para que sea de más fácil acceso. Son siete sedes que van a funcionar a contraturno en los Jardines de Chalet, San Lorenzo, Las Flores, Dorrego, Barranquitas, Atilio Rosso, dos comisiones en la Mediateca y en el CIC Facundo".

Entre las promesas, por fuera de la remodelación del Teatro Municipal y la plaza de las Banderas y del Soldado, todas en zona céntrica, otra vez los barrios: "Ya estamos pensando en una pileta pública en el norte de la ciudad".

Cinco ejes

El intendente avanzó luego en cinco temas: la recolección de residuos, la seguridad, la cultura y el turismo, la nocturnidad y la movilidad. Si bien el que más desarrolló fue el de la movilidad, el que destacó como prioritario fue la seguridad, aunque su abordaje fue menor al resto.

“La seguridad es un problema. Quizás, el principal problema”, dijo Jatón. Al respecto, anunció la suma de nuevas cámaras, más alarmas comunitarias –también en los barrios–, el fortalecimiento de la Secretaría de Control, sobre todo en los controles vehiculares, y de la GSI.

Respecto de la recolección de residuos, Jatón puso el eje en convertir en relleno sanitario local en un relleno metropolitano. También destacó la política de reciclaje implementada en los ECO Puntos y mencionó a la Asociación Civil Dignidad y Vida Sana. El viejo sindicato de cirujas del volcadero de Yapeyú, nacido en el derrumbe del menemismo, otra vez cobró protagonismo en el recinto.

Fue en este tema donde también apunto a la gestión anterior, al referirse al relleno sanitario: "Cuando llegamos a la gestión, estaba a punto de alcanzar su capacidad máxima, con un contrato a punto de vencerse, sin pliego licitatorio desarrollado ni espacio físico para su extensión".

A la hora de entrar a la cultura y el turismo, el intendente capitalizó la continuidad de las transformaciones en la vida urbana que tuvieron lugar en los últimos años. Hace rato que Santa Fe no es la ciudad dormida y gris que supo ser. Destacó en ese punto la utilización de las calles en la Noche de las Ideas y la incorporación de la manzana jesuítica al circuito de turismo internacional.

El episodio de los botellazos de agua congelada tirados al bar Gente que no impactó en la gestión más de lo que se cree. La nocturnidad siempre es fuente de conflictos de convivencia, pero también le da vida a una ciudad. Las ordenanzas antiguas obligaron al desplazamiento de boliches y restringieron al máximo uno de los placeres ancestrales de la especie humana. En Santa Fe es difícil bailar. A la inversa, ciudad se convirtió en una interminable rotisería. Alcohol y fritanga por doquier.

Jatón se centró en la elaboración de un nuevo plan de nocturnidad –sobre el cual no adelantó mucho– y ponderó los balcones gastronómicos, una salida de emergencia en la pandemia que  "ya son parte de nuestro paisaje urbano".

La movilidad, un punto aparte

De los abordados y por la propuesta planteada, el punto de mayor complejidad, en términos políticos y de gestión, es la movilidad. Jatón hizo anuncios fuertes, habrá que ver cómo se desarrollan.

En la perspectiva interurbana, anunció la licitación de la Terminal de Ómnibus. Pero, también, comunicó que se están haciendo los estudios de factibilidad para que la Estación Mitre sea el punto de llegada de un tren entre Santa Fe y Santo Tomé, en un obra junto a Nación, Provincia, la UNL y Trenes Argentinos. "Trabajamos para que La Estación Mitre vuelva a ser una estación de trenes con vida para el borde oeste santafesino", dijo el intendente.

Ese diagnóstico previo es el exacto reverso de lo sucedido con el Tren Urbano, el intento de último minuto del intendente Mario Barletta en pos de cumplir una de sus principales promesas de campaña. Los dos vagones plásticos nunca sirvieron para nada y nunca estuvo del todo claro por dónde debían ir y para transportar qué. Terminaron guardados, a costo del municipio.

Según Jatón, la Municipalidad gastó 60 millones de pesos en el intento. La cifra parece demasiado baja a montos actuales. Los vagones serán subastados.

Más realista y más difícil es la gestión del transporte urbano de pasajeros por ómnibus. El bondi es Santa Fe es caro, lento y malo. Primero, Jatón hizo referencia a un tema de agenda pública en las últimas semanas: el precio del colectivo. "Tiene que haber una necesaria equiparación de la tarifa del transporte público de pasajeros a nivel nacional. No podemos seguir permitiendo que en el interior del país el boleto triplique al de ciudad y provincia de Buenos Aires".

Después, el intendente anunció la esperada licitación de los colectivos. "Vamos a presentar los pliegos para que este cuerpo analice la futura licitación del transporte público de pasajeros, y la Ordenanza que lo regula. Nadie puede oponerse a la actualización de un servicio que no se moderniza desde la década de los 90", dijo Jatón.