Adoquines de plástico reciclado: un primer paso para urbanizar los barrios

Miembros de asociaciones civiles, recuperadores urbanos, militantes y vecinos interesados se reunieron para dar inicio a la Cooperativa de Adoquines ECOMAT.

La propuesta surgida desde el espacio local Barrio 88, propone reciclar y reutilizar el plástico que se desecha en la ciudad para realizar -mezclado con arena- adoquines que permitan urbanizar un buen número de calles de la ciudad. El adoquín fue elaborado con la colaboración del investigador del Conicet, Ignacio Rintoul, que junto a la empresa Novartek SRL, situada dentro del PTLC (Parque Tecnológico Litoral Centro), transfirieron la tecnología necesaria para poder desarrollarlos. Los adoquines, además, fueron certificados por la UTN Regional Santa Fe.

Discutir qué se hace con los residuos en la Ciudad

En la ciudad de Santa Fe el 15% de los residuos domiciliarios son plásticos, lo que equivale a más 16.200 toneladas. Recuperando esa cantidad de plásticos por año, según estiman, se pueden hacer más de 40 calles de adoquines.

Al respecto, Guillermo Jerez, actual Concejal y referente de Barrio 88, remarcó que el proyecto va en línea con las diferentes líneas de trabajo de su banca, tanto en el cuidado del ambiente (por ejemplo: una de sus propuestas es la creación de una Reserva Humedal Laguna Setúbal), como en la discusión sobre el actual modelo de gestión de residuos: “nuestra ciudad tiene un problema estructural con los residuos: un relleno sanitario con fecha de vencimiento y microbasurales que día a día se generan en todos los barrios“

“Hay que cambiar el modelo de gestión de residuos sólidos urbanos” dictamina Jerez, para esto, el otro paso fundamental sobre el cual vienen trabajando es “una ordenanza rectora, un plan integral de gestión de residuos sólidos urbanos que ordene la legislación dispersa y proponga una normativa clara”.

Organizar vecinos, urbanizar los barrios y generar trabajo

No sólo en relación a los residuos y el cuidado del ambiente este proyecto se propone como disruptivo: también permite poner el primer “ladrillo” de plástico reciclado para la urbanización de los barrios de nuestra ciudad, un primer paso para contrarrestar el histórico anegamiento y la falta de servicios públicos esenciales. Además, la cooperativa podrá generar puestos de trabajo verdes para vecinas y vecinos de los barrios de nuestra ciudad, una de las principales problemáticas actuales. Todo ello, se está armando con vecinas y vecinos de distintos puntos de la capital santafesina, organizados para mejorar su calidad de vida.

 

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Luego de una primera actividad, con una demostración de cómo se realizan los adoquines de plástico reciclado mediante, la conformación de los grupos de trabajo, del equipo de gestión y del espacio a funcionar son los pasos a seguir que desde esta semana se comenzaron a dar.

Queda mucho trabajo por hacer y desde Barrio 88 sostienen que la participación ciudadana es vital para que la Cooperativa logre sus objetivos y junte más fuerza. La iniciativa es abierta a la participación de las y los vecinos interesados en la temática. Para ello, sólo queda comunicarse vía mail ([email protected]) o escribirle en Instagram o Facebook.