Avanza la construcción del Circunvalar Santa Fe, la obra que sacará el recorrido del ferrocarril de carga de la ciudad. Kilómetros de vías y de terrenos estratégicos quedan disponibles para proyectos urbanos. Dialogamos con ocho concejales de nuestra ciudad y les preguntamos qué imaginan que puede hacer Santa Fe con las tierras de las vías ferroviarias que queden en desuso.
En septiembre de 2021 el gobierno provincial y el nacional anunciaron un acuerdo para construir una importante obra ferroviaria, con el objetivo de sacar el tren de carga que todavía atraviesa Santa Fe y Santo Tomé. El Circunvalar ferroviario se denominó al conjunto de trabajos que permitirán que el tren rodee la ciudad en lugar de atravesarla, evitando 61 pasos a nivel en medio de la traza urbana, reduciendo el viaje en ese tramo a un cuarto del tiempo y achicando los costos logísticos en un 30%.
La obra es pionera en todo el país. Nunca se hizo una circunvalación ferroviaria de estas características. Contempla la construcción de 15,5 kilómetros nuevos de vías y la modernización de otros 45 kilómetros. Se creará un nuevo puente ferroviario de 900 metros de largo sobre el río Salado y tres nuevos puentes vehiculares sobre las rutas provinciales 70, 11 y 4, para cruces a distinto nivel. También, se construirán 53 alcantarillas nuevas; se realizará el cerramiento para zona rural y urbana y la relocalización de la estación de bombeo de Santo Tomé, manteniéndose las cuatro bombas actuales y con el agregado de cuatro nuevas.
El anuncio no quedó en el aire. Con un presupuesto total estimado en tres mil millones de pesos, el 4 de mayo de este año se colocaron las primeras vías del Circunvalar. Según la ministra de Infraestructura de la provincia, Silvina Frana, los trabajos ya podrían estar terminados para junio de 2023, “si no hay complicaciones extraordinarias”.
El proyecto consiste en hacer una traza ferroviaria que desde Laguna Paiva vaya hacia Nelson, al oeste, para luego, en un recorrido nuevo, bajar hasta Empalme San Carlos y, desde allí, a Santo Tomé.
Para la ciudad de Santa Fe, eso significa que se libera de tránsito ferroviario de carga la vía del Belgrano que ingresa paralela a la avenida General Paz y luego la cruza, para después girar al oeste, transcurrir en el límite norte de barrio Candioti, adentrarse en barrio Mariano Comas para pasar por detrás del Club Unión, elevarse y partir la ciudad con el terraplén que divide a Villa del Parque, Villa Oculta y Santa Rosa de Lima y luego salir hacia el oeste y cruzar el Salado, hacia Santo Tomé.
Es un montón de tierra urbana que queda libre. Es tierra nacional, bajo el dominio de la Agencia de Administración de Bienes del Estado, que puede cederla a los municipios a través de diversos mecanismos.
La oportunidad para la ciudad es significativa. Representa un desafío de gestión pública, participación social e imaginación urbanística. Los antecedentes son variopintos: está el Parque Federal y su Procrear, y también está la venta de los terrenos de la Terminal de Ómnibus a las inmobiliarias locales o el tren urbano, una buena idea muy mal ejecutada, con un costo millonario para el municipio. Está el barrio La Carbonilla, crecido apenas empieza la Estación Belgrano y está el Centro Cultural y Social El Birri, en la Mitre.
En busca de abrir un debate público ante un nuevo escenario que se aproxima, dialogamos con ocho concejales de nuestra ciudad y les hicimos las mismas dos preguntas: ¿Qué imaginás que puede hacer Santa Fe con las tierras de las vías ferroviarias que queden en desuso? Y, específicamente, ¿qué se puede hacer con el terraplén que separa a Santa Rosa de Lima, Villa del Parque y Villa Oculta del resto de la ciudad?
Adriana Molina - Juntos por el Cambio
1) Siempre trabajamos y tuvimos la convicción de que el Circunvalar era una gran oportunidad para los vecinos y vecinas de la ciudad. En primer lugar, para la integración del tejido urbano. Esto es: derribando terraplenes, con la apertura de calles y conectando vecinos y barrios que quizá durante toda su vida estuvieron separados. Mejor circulación, más seguridad, sin dudas es una gran noticia. Pero también son espacios públicos, corredores verdes. Y hay que tener en cuenta las nuevas costumbres en la movilidad, como el uso de la bicicleta.
2) Lo primero es la integración de estos barrios con los otros barrios de la ciudad. Esto significa más seguridad, mejor circulación y conectividad. Pero además, un uso intensivo del espacio en este sector de la ciudad, como el Nido de la Mediateca, que se hizo en un espacio ferroviario. Pensamos en la necesidad de equipamiento social, cultural, de salud.
Mercedes Benedetti - Frente Progresista
1) No hay una sola respuesta. Depende de cómo pueda usarse. Pueden darse soluciones habitacionales, tan importantes en este momento por el déficit que tenemos, o para espacios públicos, de encuentro. Es necesario que cada barrio cuente con estos espacios. O para formar parte de un sistema de movilidad que nos permite adaptarnos y ver, de una manera múltiple, todas las maneras de movilizarnos que tenemos los santafesinos y las santafesinas de norte a sur y de este a oeste.
2) Creo que los terraplenes, cuando no cumplen su función específica de proteger a los barrios de las inundaciones, por ejemplo, no tienen sentido. Sólo logran separar a las sociedades, a los vecinos de la ciudad del resto de los vecinos. En caso de que no cumplan su función específica, considero que deben sacarse.
Laura Mondino - Frente Progresista
1) Cuando uno ve todo el tendido de las vías ferroviarias en nuestra ciudad, vemos que tiene una enorme potencia. Tenemos un tendido que es privilegiado. La ciudad se conecta por sus vías del norte al sur, del este a oeste, y tenemos posibilidades de conectarnos con las ciudades vecinas. Tenemos que apostar al desarrollo de sistemas multimodales que permitan movernos con distintos medios. Desde la Municipalidad se vienen trabajando en proyectos de estaciones multimodales, nodos que conecten distintos medios de transporte, bicis, colectivos taxis y, por qué no, trenes. También se viene trabajando en el recorrido metropolitano: un tren a Santo Tomé, en el que hubo un avance, un convenio de la Municipalidad con la Nación, la Provincia y la UNL. Es un recorrido que iría primero a Santo Tomé y luego a Sauce Viejo. También se viene trabajando en un proyecto de tren a Laguna Paiva, justamente en todo el tendido que deja liberado el Circunvalar. La idea es proyectar un recorrido desde la Estación Belgrano hasta Laguna Paiva.
2) Yo aspiro a que el tren vuelva a ser un medio de transporte público en nuestra ciudad. Hay muchos proyectos que hoy se están evaluando y sobre los que se viene trabajando. Cuando finalice la obra del Circunvalar, todo el recorrido que une Santa Rosa, Villa del Parque y Villa Oculta podría usarse para un tren de escala urbana que conecte de las estaciones Mitre y Belgrano. Para mí ese sería un proyecto maravilloso, con estaciones multimodales en el sector del Hospital de Niños y del Parque Garay. Y que ese terraplén y esa vía dejen de ser una frontera en la ciudad, como son hoy. Nosotros desde este espacio político y desde esta gestión queremos derribar fronteras y trabajar en los barrios que han sido históricamente olvidados.
Lucas Simoniello - Frente Progresista
1) El suelo público es estratégico para el desarrollo de las ciudades y desde Encuentro venimos trabajando mucho la temática de vivienda, espacio público y movilidad. Hicimos un relevamiento que presentamos allá por febrero de 2020, donde contábamos que la ciudad cuenta con más de mil hectáreas con destino residencial, de las cuales el 95% son de propietarios privados, pero que con ese 5% público podíamos construir más de cinco mil hogares, cinco mil viviendas, cinco mil nuevas casas para darle más oportunidad de acceso a la vivienda a los santafesinos y santafesinas. Destacamos ejemplos muy positivos del destino del suelo púbico, como el Procrear frente a Parque Federal, la construcción de viviendas en Barranquitas Oeste, y criticamos duramente la subasta de los terrenos de la Terminal. Creemos que el suelo público debe ser destinado para satisfacer necesidades públicas: de vivienda, de seguridad en la tenencia de la tierra, de espacio público y de equipamiento urbano.
2) Con esta oportunidad del Circunvalar tenemos que discutir distintos temas que hemos traído al Concejo Municipal, como la creación de un banco de tierras, para saber cuáles son las tierras públicas y privadas, un régimen especial de subdivisiones que permita que más familias puedan acceder a una porción de tierra para construir su vivienda, un relevamiento de viviendas ociosas o en desuso que tienen que cumplir con una función social y ambiental y una gestión de vacancia urbana, de esos baldíos que tantos problemas nos traen y que tienen que ser, como en este caso los viejos terrenos del ferrocarril, una oportunidad para que más santafesinos puedan acceder a seguridad en la tenencia de la tierra, a una vivienda y a equipamiento y espacio público de calidad.
Julio Garibaldi - Frente Progresista
1) Es importante que esos terrenos sean patrimonio de la ciudad, de todos los santafesinos. Que esas decisiones no se tomen en un lugar cerrado sino que toda la ciudadanía sea parte. Nosotros impulsaríamos que sean dedicados a espacios públicos, con las mejores condiciones, con el mejor equipamiento urbano, con la mejor iluminación, como hemos hecho en Santa Fe con muchos otros espacios, que cuando se hacen bien la gente los ocupa, los cuida y los aprovecha. Pensando, primero, en los niños. Si pensamos primero en los niños, seguramente después lo puede usar toda la ciudadanía. Y seguir ampliando la traza de bicisendas, para conectar Santa Fe de norte a sur y de este a oeste.
2) Hoy ese terraplén funciona como un gran muro geográfico, que separa a Santa Rosa, Villa Oculta y Villa del Parque del resto de la ciudad. Nos parece fundamental eliminarlo. Cuando se corra toda la traza del actual ferrocarril por el Circunvalar y deje de pasar por dentro de la ciudad, nos parece importante reconvertir ese lugar. Cuando Miguel Lifschitz fue gobernador de la provincia propuso para ese lugar algo específico: refuncionalizando el ex Hospital Iturraspe, crear un distrito de la innovación y, particularmente, con ese terraplén, convertirlo en la “avenida sin fronteras”. Ese nombre no es casual, obedece a esta idea de integrar a la ciudad, de resignificar un espacio que se fue deteriorando y que quedó como la periferia. “Avenida sin fronteras” es una avenida con las mejores condiciones, con un plan de conectividad y movilidad para el transporte público de pasajeros, que permite integrar Santa Fe y brindarle los mejores servicios.
Guillermo Jerez - Barrio 88
1) En primer lugar, las tierras que quedarán en desuso del ferrocarril tienen que pasar a manos del municipio. Es el Estado municipal el que planifica el crecimiento y el desarrollo urbano de la ciudad y el que administra el uso del suelo. En segundo lugar, una cuestión para nada menor: estas tierras no pueden ni deben enajenarse. Ya hubo intentos en la ciudad por enajenar las 24 hectáreas del predio de la ex estación Belgrano. Es la ciudadanía, con distintos mecanismos de participación, quien debe definir qué hacer con esas tierras. Por otro lado, las tierras que quedarán en desuso de las distintas líneas férreas, tienen que reservarse para una eventual reactivación del ferrocarril. No puede haber plan de movilidad multimodal ni metropolitano, que es el desafío que tenemos por delante, sin pensar en la reactivación del tren.
2) Las tierras del terraplén de los barrios Villa del Parque, Villa Oculta y Santa Rosa tienen que destinarse a abordar los dos principales problemas que tienen los barrios del oeste de nuestra ciudad. El primero es la violencia urbana. Por eso, es importante que las tierras puedan destinarse a espacios comunitarios que puedan brindar distintas opciones y alternativas de contención a gran parte de los jóvenes de los barrios. Y, en segundo lugar, tienen que destinarse a brindar acceso de la vivienda, que es otro de los grandes problemas de la juventud. Tienen que brindarse a dar soluciones habitacionales a través de distintas modalidades de producción del hábitat.
Federico Fulini - Frente de Todos
1) Lo primero que hay que hacer es consultarle a la ciudadanía qué desea hacer con esas tierras y no permitir que se convierta en un festival del negocio inmobiliario. Hay un montón de usos que se le pueden dar, vinculados a la comunidad, a la sociedad: espacios verdes, construcciones de uso público. Son tierras en lugares estratégicos de la ciudad. Debemos bregar para que se los apropie la comunidad. Hay que llamar a la comunidad, sea con una audiencia o convocando a las vecinales. Primero, saber qué quiere la sociedad y luego dar la discusión en las instituciones.
2) El terraplén denota una cuestión simbólica muy fuerte. Es una suerte de muro que divide un barrio de otro. Lo primero que se debería hacer, evaluando si es conveniente en términos técnicos, es abrir caminos que conecten los distintos barrios. Hay que tender esos caminos, derribar los muros que existen y que muchas veces se vuelven muros sociales. Es una cuestión simbólica muy fuerte que un muro separe un barrio. Lo primero que hay que hacer es abrir caminos.
Jorgelina Mudallel - Frente de Todos
1) Para pensar el mejor destino de las tierras que van a quedar disponibles es fundamental generar una mesa de gestión donde se sienten los tres niveles del Estado. Hay que sanear las zonas aledañas a esas vías. Hoy lo que se está discutiendo es el regreso de los trenes de cercanía, el regreso de los trenes de pasajeros para la ciudad de Santa Fe, se está trabajando en dos tramos importantes, Santa Fe-Laguna Paiva y Santa Fe-Santo Tomé. Es necesario confirmar cuáles van a ser esas vías porque se está pensando en esos tramos y en otros más. Esos terrenos van a tener ciertas particularidades que tienen que ver con la infraestructura existente. Nosotros vamos a apostar a que sean para uso púbico, para que todos los santafesinos y santafesinas puedan disfrutarlos. Desde vías de conexión para tramos entre este y oeste, que no hay, la creación de ciclovías, espacios públicos de calidad. Hay que planificarlos, pero no lo puede definir solamente el municipio.
2) Una vez que se garantice que esas vías van a quedar en desuso, se pueden retirar y se puede llevar adelante una especie de bulevar, donde haya ciclovías, donde se permita que los barrios se conecten con otros barrios de la ciudad. Ese terraplén hoy juega el papel de muro, puede derribarse, generando una suerte de Paseo Escalante, por ejemplo. Que el arbolado público permita llevar adelante un cinturón ecológico, donde en las zonas aledañas se pueda avanzar en huertas urbanas. Pero, sin duda, lo primero es llevar adelante el saneamiento de las zonas aledañas para poder habilitar la transitabilidad liviana, pensando en peatones, en ciclistas.