El 67% de los votantes aprobaron el Código de las Familias promovido por el Gobierno de Díaz-Canel.
Los cubanos aprobaron en referendo, con un 66,87% de votos, un nuevo Código de las Familias que legaliza el matrimonio y las adopciones igualitarias y la subrogación de vientres, lo que ubica a la isla comunista en la vanguardia de América Latina en esta materia.
La presidenta del Consejo Electoral Nacional, Alina Balseiro Gutiérrez, ha comparecido este lunes ante los medios para confirmar que el 66,87% de los votos válidos, más de 3,9 millones, avalaban la actual reforma, frente al 33,13%, más de 1,9 millones, que dijeron ‘no’.
Según el Consejo Nacional Electoral (CEN), ejercieron su derecho al voto 6.251.786 electores, equivalente al 74,01% del padrón.
El código, que había sido aprobado por la Asamblea Nacional en julio y sustituirá la legislación vigente de 1975, fue objeto de una intensa campaña mediática y en redes sociales por parte del Gobierno a favor de su aprobación en el referendo celebrado este domingo.
Se trata de una rectificación legal a la marginación que sufrieron los homosexuales que se siguió en la isla como política estatal en las décadas de 1960 y 1970, y cuya discriminación fue prohibida por la Constitución de 2019.
Díaz-Canel también ha expresado en Twitter su “alegría” por los primeros resultados, aunque ha advertido de que Cuba entra en una “desafiante semana” por la llegada de Ian.
Ganó el Sí. Se ha hecho justicia. Aprobar el #CódigoDeLasFamilias es hacer justicia. Es saldar una deuda con varias generaciones de cubanas y cubanos, cuyos proyectos de familia llevan años esperando por esta Ley. A partir de hoy seremos una nación mejor. #ElAmorYaEsLey ❤️🇨🇺 pic.twitter.com/O5o0Hi2cm1
— Miguel Díaz-Canel Bermúdez (@DiazCanelB) September 26, 2022
El oficialismo cubano había hecho campaña en favor del ‘sí’, mientras que en el lado contrario se ha situado la Iglesia Católica y un sector de la oposición que cuestionaba la mera participación en la consulta, por considerarla una forma de legitimar al actual Gobierno.
El nuevo Código de las Familias cubano define el matrimonio como la unión "entre dos personas", abriendo la puerta al casamiento igualitario y a la adopción para parejas del mismo sexo.
También permite reconocer legalmente a varios padres y madres, además de los biológicos, así como la gestación subrogada, sin fines de lucro, en tanto suma otros derechos que favorecen a los niños, ancianos y discapacitados.
Esta es la primera vez que una ley diferente a la Constitución es sometida a referendo en Cuba.
Los principales opositores a la votación se focalizaron en las iglesias cristianas, tanto católica como protestantes.
La Conferencia de Obispos Católicos de Cuba criticó este mes la llamada "ideología de género", que sustenta muchos preceptos contenidos en la nueva legislación, como el matrimonio gay, la gestación asistida y la posibilidad de que los menores puedan iniciar un proceso clínico para cambiar de sexo.
En América Latina, el matrimonio igualitario es legal en la Argentina, Uruguay, Brasil, Colombia, Ecuador, Costa Rica, Chile y en varios estados mexicanos.
Cuba trató de introducir el matrimonio igualitario en la Constitución de 2019, pero el Gobierno tuvo que dar marcha atrás ante fuertes críticas de las Iglesias católica y evangélica.